La manera como Keiko Fujimori mangonea en FP.,Las sanciones que anuncian los mototaxistas de Keiko Fujimori –Lourdes Alcorta, Daniel Salaverry– a sus colegas de bancada Yesenia Ponce y Kenji Fujimori, son expresiones de la manera como ella ejerce la jefatura de Fuerza Popular (FP): con un déficit de liderazgo que trata de compensar con expresiones burdas de autoridad. El 2016 le trajo a Keiko Fujimori su segunda derrota consecutiva, pero vino con la llegada una plataforma parlamentaria pocas veces vista antes por su tamaño –73 de 130 congresistas– aunque no por su inteligencia. En este sentido, teniendo casi todo para consolidar un gran partido político que avance de manera inexorable hacia el 2021 para que ese año signifique que a la tercera va la vencida, parece que se dirige hacia un resultado que sería del tipo ‘la vencida va a la tercera’. Una mayoría de 73 integrantes, estar en la oposición, y tener la sensación de que su jefa Keiko Fujimori es la candidata con más posibilidad en el año 2021, constituyen ingredientes que ayudarían mucho a tener el queque parlamentario bien compacto. Sin embargo, lo que se percibe es una bancada a la que se le fueron dos –Yeni Vilcatoma y Patricia Donayre–, que en breve se irían dos más –Yesenia Ponce y Kenji Fujmori–, y que la estampida podría seguir en los meses siguientes. Es cierto que hay un problema de origen en esa bancada. Empezando, ya que hablamos del queque parlamentario, por los ingredientes. La verdad sea dicha, hay ahí unos cuantos valiosos, pero el montón de candidatos que se colaron con el aluvión parecen los de un langoy de paupérrima condición. Como Ponce pero, también, como muchos más de FP. Pero incluso con esos ingredientes se pudo preparar algo mucho mejor si es que se les cohesionara en función de la capacidad de articularlos gracias a un liderazgo que persuada, motiva y guíe, en vez de hacerlo mediante una autoridad que guapea, manda y amenaza con sanciones al que se desalinee del pensamiento guía de la mototaxi. Y, entonces, como Keiko Fujimori no puede liderar sino solo mandar, tienen que sacar leyes inconstitucionales como la ‘antitránsfuga’ y, cuando el TC se lo hace notar, inmediatamente hacen sus interpretaciones ‘auténticas’ y, entre gallos y medianoche, sacan otra norma para sacarle la vuelta al fallo del tribunal. El problema de fondo es que la manera como Keiko Fujimori maneja FP demuestra que todavía le falta muchísimo en el camino de prepararse para ser presidenta del Perú.