Acusan a taxista de tocamientos indebidos a joven en Jesús María: familia de la víctima exige justicia

En la madrugada de este domingo 12 de enero, una joven de 23 años denunció haber sido víctima de tocamientos indebidos y actos de connotación sexual por parte de Carlos Alfonso Barrera Garibaldi, de 43 años, quien trabaja como taxista. El presunto agresor se encuentra bajo custodia policial.

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Acusan a taxista de realizar tocamientos indebidos a joven

Según la víctima, asistió a una fiesta junto a un amigo en una discoteca del Cercado de Lima. Durante la noche, dos sujetos se acercaron al grupo, entre ellos el presunto agresor. En horas de la madrugada, Barrera Garibaldi, quien trabajaría como taxista, se ofreció a trasladarla a la casa de su amiga en el distrito de Jesús María.

Sin embargo, en el trayecto, el vehículo se detuvo a una cuadra del destino. La amiga de la víctima, quien rastreaba la ubicación desde su celular, notó que el auto permaneció inmóvil durante más de 20 minutos. Al acudir al lugar, encontró a su amiga inconsciente y al presunto agresor con el cierre del pantalón abierto.

Las pruebas del médico legista confirmaron que no hubo violación. Sin embargo, el sujeto habría cometido el delito de tocamientos indebidos. Ante ello, la familia exige justicia y alegan que la intención del agresor era clara.

“Si mi hija no hubiera tenido a su amiga, esto podría haber terminado de una manera mucho peor. Pido a las autoridades que actúen con firmeza. Este hombre puede haber hecho lo mismo antes y puede volver a hacerlo”, declaró la madre de la víctima entre lágrimas.

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Ministerio Público investiga a presunto agresor

El detenido, Carlos Alfonso Barrera Garibaldi, no tiene antecedentes penales. Sin embargo, la fiscalía a cargo, liderada por el Dr. Henry Gutiérrez Córdova, inició una investigación por el presunto delito contra la libertad sexual en la modalidad de actos libidinosos sin consentimiento.

Cabe señalar que, la intervención se realizó en un vehículo que pertenece al detenido, quien utilizó su posición como taxista y la confianza ganada para perpetrar el presunto delito.

Las investigaciones continúan, y el caso sigue siendo un recordatorio de la importancia de tomar precauciones al interactuar con desconocidos.