A Puno llegan cerca de 243 personas desde Lima y son sometidas a prueba de COVID-19
Decenas de familias que estaban varadas en la capital arribaron a Puno para pasar la cuarentena. De manera preventiva, serán llevados a un hotel para descartar que sean portadores del coronavirus.
Vuelven a casa. Cerca de 243 personas por fin llegaron a Puno desde Lima, donde permanecían varadas. Dichos pobladores resultaron beneficiarios de los traslados humanitarios aprobados por el Gobierno. Por ahora, están pasando por el tamizaje médico para determinar si están o no contagiados con el COVID-19.
Las familias arribaron en seis buses pertenecientes a la empresa de transportes “Flores Hermanos”. Alrededor de las 15:20 horas de este lunes, llegaron a las instalaciones del Circuito de Manejo de la Dirección Regional de Transportes de Puno, ubicada a unos kilómetros del sector norte de la ciudad altiplánica.
PUEDES VER: Puno: Trasladan encomiendas con alimentos para residentes de Carabaya en regiones del sur
El gobernador de Puno, Agustín Luque, estuvo presente a su llegada, así como un equipo médico que se encargó de someter a las más de 200 personas a las pruebas rápidas de despistaje del coronavirus. Aún esperan conocer sus resultados para conocer a donde serán trasladados.
En caso se reporten casos positivos de la pandemia, los infectados deberán ingresar a un lugar dispuesto por las autoridades. El resto de familias serán conducidas a un hospedaje para que cumplan con el aislamiento social respectivo y así verificar si en los próximos días presentan sintomatología relacionada con el COVID-19.
En tanto, la Policía Nacional resguarda los vehículos para evitar incidentes o posibles fuga de pasajeros como se dio en otras regiones del país.
PROCESO
Las familias que se beneficiaron con los viajes humanitarios, primero debieron esperar por varios días y luego inscribirse en el padrón habilitado por el Gobierno Regional de Puno. El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) se encargó de pasar las listas por un filtro y seleccionar a las personas más vulnerables, es decir, niños, mujeres gestantes, adultos mayores o aquellas con enfermedades crónicas.
