Se internó mar adentro para “sobrevivir al fin del mundo”, saltó del barco y ahora no aparece

Desde hace 2 años, un joven estadounidense es intensamente buscado por sus familiares y la Policía local luego de que decidiera abandonar su hogar en la ciudad de Grand Rapids, en Michigan. Su miedo por las teorías conspirativas que circulaban en redes sociales ante la COVID-19 habría sido la causa. “No se vacunen o no entrarán en el cielo”, fueron las palabras de Isaac Danian antes de su desaparición.

En el 2020, varios países impusieron restricciones por la emergencia sanitaria, situación que puso un poco paranoico a Isaac, quien antes de irse de casa les pidió a sus padres que vendieran todas sus pertenencias. Se fue sin contar a nadie su destino: “Ojalá pudiera decírselos”.

Un mes después de su partida, en octubre, el joven se puso en contacto con sus padres y mandó una fotografía en la cual se lo veía con otro hombre y un pez en las manos. Lo último que les dijo fue que emprendería un viaje de 30 días en los que no podría contactarlos.

La historia dio un giro inesperado cuando ya no se supo nada de Isaac. Sus padres se contactaron con la Policía y descubrieron que el joven había comenzado a seguir a un supuesto gurú llamado Matthew Mellow, quien publicaba en sus redes teorías infundadas sobre cómo “sobrevivir al fin del mundo y los efectos nocivos de la vacuna anti-COVID-19″, reportó CNN.

Lo que pudo descubrir el medio internacional es que Mellow era un reclutador de “hombres de cuerpo sano” para iniciar un viaje desde Hawái hasta el Pacífico Sur. Su objetivo era ir a un lugar donde la pandemia supuestamente no había llegado. Atraído por esta consigna, Isaac lo contactó,

Emprendió un viaje al Pacífico Sur

Fue así que Isaac consiguió un par de barcos y capitanes que los llevarían a su destino. En su travesía, estuvo acompañado de otra persona llamada Shukree Abdul-Rashed, de Nueva York. Primero se dirigieron a las Islas Cook, pero no pudieron entrar por las restricciones sanitarias, así que enrumbaron a las Islas Wallis, territorio francés, sin saber que todo estaba por cambiar.

Debido a sus creencias, los jóvenes rechazaron hacerse la prueba de detección de la COVID-19 que les pedían y, en una medida precipitada, saltaron del barco. “Querían evitar someterse a la prueba de PCR (…) tenían miedo”, contó Abigael, madre de Isaac.

Inmediatamente, las autoridades locales implementaron un operativo de búsqueda; sin embargo, nunca los encontraron. Han transcurrido más de 2 años y aún no hay noticias de Isaac. Pese al tiempo, sus padres mantienen la esperanza de que regrese a casa.

“Si alguien te dijera, ‘Tu hijo probablemente se murió’, ¿lo aceptarías y seguirías adelante? Eso no es algo que podamos hacer”, agregó.