Mientras los departamentos generan renta inmediata, pero con altos costos de administración, los terrenos destacan como una opción más accesible, de fácil gestión y con gran potencial de valorización a largo plazo. ¿Cuál es la mejor alternativa para los inversionistas peruanos?
En esta nota, analizaremos las ventajas y desventajas de cada opción, así como las consideraciones que deben tener en cuenta los interesados en el mercado inmobiliario estadounidense.
Una de las opciones más populares entre los inversionistas peruanos es la compra de departamentos en ciudades como Miami y Orlando, con el objetivo de arrendarlos y generar ingresos desde el primer momento. “Este modelo permite a los compradores apalancarse con bancos estadounidenses, que suelen financiar entre el 40% y el 60% del valor de la propiedad, incluso para extranjeros”, señala Alan Ferszt, gerente comercial de Owny, una startup inmobiliaria presente en el mercado estadounidense por más de 17 años.
Invertir en departamentos en EE. UU. es atractivo porque genera renta inmediata y permite a los inversionistas diversificar su capital en una economía estable. Sin embargo, este tipo de inversión también conlleva ciertos retos. “Los costos de administración, mantenimiento y contabilidad pueden reducir significativamente la rentabilidad, además de que el inversionista debe gestionar aspectos fiscales, como la obtención de un Tax ID y la declaración de impuestos”, agregó Ferszt.
Por otro lado, la compra de terrenos en EE. UU. se presenta como una opción más accesible y con menores complicaciones. En zonas con alto potencial de crecimiento, como Lehigh Acres, Florida, es posible adquirir terrenos desde menos de USD 25,000, una fracción del costo de un departamento en Miami o Nueva York.
“Los terrenos ofrecen una inversión con menos costos operativos y sin la complejidad de la administración de inquilinos. Es una opción ideal para quienes buscan una valorización a mediano o largo plazo”, afirma el representante de Owny. Al no generar renta inmediata, la compra de terrenos no requiere trámites fiscales complejos ni la creación de una empresa para gestionar la propiedad.
La decisión entre un terreno o un departamento en EE. UU. dependerá de los objetivos de cada inversor. Para quienes buscan rentabilidad a corto plazo y no les importa asumir costos de administración, los departamentos pueden ser una excelente alternativa. Sin embargo, para quienes prefieren una inversión a menor costo y con menos complicaciones operativas, los terrenos son una opción a considerar.
“Es fundamental entender el mercado, los costos y las proyecciones de crecimiento antes de invertir”, finaliza Alan Ferszt.