John Peter Carrión de la Cruz es un joven mototaxista que durante la cuarentena perdió a su madre y por pedido de ella decidió regalar postres a los más necesitados. Antes del inicio de la cuarentena por la COVID-19, él trabajaba como mototaxista en el Callao y a su vez estudiaba la carrera técnica de repostería.
En abril, tras fallecer su progenitora a los 62 años por una enfermedad relacionada con la tuberculosis durante el Estado de Emergencia, John decidió cumplir uno de los pedidos que le hizo a su mamá antes de partir.
“Un día conversando con ella me dice: ‘John, llévales un poco de mazamorra para esos muchachos para que puedan endulzar sus días, no sabemos si comen o si les falta agua’, aseguró.
Carrión de la Cruz tenía nociones de cómo preparar arroz con leche, arroz zambito y mazamorra morada. Desde ahí cumple su palabra y reparte 50 tápers diarios a las personas que han perdido su trabajo debido a la pandemia.
Al enterarse de la iniciativa, los vecinos de este solidario muchacho decidieron apoyarlo con el reparto, así como brindándole insumos para los postres.
John sale todos los días repartiendo estos dulces desde la Plaza Grau hasta la altura del Plaza Vea de Bellavista, cumpliendo la promesa de su madre. Es tanto su compromiso que tiene un plato distinto cada día; los lunes ofrece mazamorra morada, los martes champú, miércoles arroz zambito, jueves arroz con leche, viernes torta de chocolate y los sábados café caliente con kekes caseros.
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