Tiendas ya cobran por bolsas de plástico en Arequipa
La medida apunta a reducir el uso de este material, considerado como contaminante del medio ambiente. Supermercados iniciaron el cobro de S/ 0.10 por cada bolsa de plástico de un solo uso. Ley dispone un impuesto gradual.
Elmer Mamani
De un conocido supermercado de Arequipa, Ángela sale con seis bolsas. Martha, con diez bolsas y Eugenio con dos. El uso de este material es exponencial. La Ley N.° 30884 busca revertir esta costumbre que conlleva un grave daño ambiental: los plásticos contaminan los océanos y terminan en el aparato digestivo de los peces.
Distintos establecimientos de la ciudad acatan esa norma. Principalmente, supermercados, que iniciaron el cobro de S/ 0.10 por cada bolsa de plástico de un solo uso desde el 1 de julio. La ley dispone un impuesto gradual: este año se cobrará S/ 0.10, el 2019 será S/ 0.20, el 2020 será S/0.30 y así sucesivamente. El objetivo es reducir su uso.
Por ejemplo, la cadena de tiendas El Súper, en su ingreso, advierte de que se deberá pagar. Las bolsas más grandes (familiares) cuestan S/ 0.20. A algunos clientes, los agarra de sorpresa la medida. Las tiendas de Metro también realizan los cobros. Un cartel, en la entrada, anuncia que cada bolsa está S/0.10.
Ante esto, ciudadanos como Bernardo (76) ya utilizan bolsas de tela, más amigables con el entorno. “Me enteré por las noticias. Es una buena iniciativa”, opinó. “La decisión de ir de compras fue de improviso”, se disculpó Ángela, que sostenía sus seis bolsas de plástico.
Mercados y bodegas también deben acatar la disposición. Sin embargo, el emporio San Camilo (Cercado) aún no lo hace. Desde hoy, una nueva administración se hará cargo. Se espera que sus comerciantes cumplan con la norma.
La alternativa son las bolsas de tela, de papel o de plástico, pero biodegradable. Se ofrecen en los mercados y las calles desde S/1 hasta S/ 2.80, según el tamaño.
Ahora los negocios que ofrecen plásticos redujeron sus ventas. Esto, porque sus productos sufrieron un aumento de hasta 35%, señaló Mary (42), dueña de una tienda en la calle Deán Valdivia del Cercado. “Gracias a Dios, se ha tomado esta medida”, dice. Su negocio ya ofrece todo tipo de material biodegradable. Cuenta que ya hay un cambio sustancial. De cada 10 de sus compradores, al menos cinco prefieren llevar sus cosas en la mano. Un inicio.
