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Política

Debe reponer a Coya

“Usted no tiene la más puñetera idea de qué hacer en un sector tan relevante para el Perú”.

larepublica.pe
SALINAS

Ahora pídale perdón, señor Vizcarra. A Hugo Coya, obviamente. Porque lo han tratado como a un perro. ¿Quién? Su exministro de Cultura, el tal Petrozzi, no se me haga el sueco. Y usted mismo, si acaso ya olvidó que también participó del rifirrafe firmando la envenenada resolución que lo eyectaba del IRTP. Y si me apura, después de las respectivas y necesarias disculpas, propóngale regresar a su antiguo cargo. Eso sí. Va a tener que convencerlo, le advierto, porque Coya es un periodista decente y digno.

Soportar los maltratos y llamadas idiotas del personajillo que usted puso a la cabeza de Cultura, presumo que es algo que Coya no querrá volver a padecer. Pero vamos. Tiene que sopesar las cosas. Hugo Coya, en sus dos gestiones exitosas al frente del IRTP, ha demostrado no solamente profesionalismo, sino gestión, ética y pluralismo. Y sobre todo, el deseo de hacer de los medios del Estado instrumentos informativos que estén al alcance de todos los peruanos. Independientemente del gobierno de turno.

Pero ya ve. Su paso en falso al elegir a un tipo salido de las canteras del fujimorismo, acostumbrado al abuso de autoridad, de los que piensa que el canal 7 es el botín de quien detenta el poder, y en consecuencia hay que utilizarlo con fines proselitistas, nos ha llevado a esta triste situación que desnuda varias cosas.

Entre otras, sus supuestos “principios democráticos”, que han sido cuestionados, con razón, luego de este escándalo. Sus caprichos políticos, cuando no hay contrapesos, se pueden convertir en peligrosos actos autoritarios, pues el poder siempre suele corromper. Aceptar y avalar la salida intempestiva de alguien del perfil de Hugo Coya ad portas de un evento electoral, con presiones repelentes e inadmisibles, tampoco habla bien de su espíritu pluralista y republicano, digo.

Por lo demás, el desfile de seis ministros de Cultura en los últimos años, indica asimismo una cosa muy clara: Que usted no tiene la más puñetera idea de qué hacer en un sector tan relevante para el Perú.

En síntesis. Su credibilidad se ha metido un aparatoso contrasuelazo, señor Vizcarra. Ergo, enmiende humildemente su error. Pídale perdón a Coya y repóngalo en su puesto. Hugo llega mañana de Europa. Llámelo, invítelo a Palacio y hagan las paces.