El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, explicó este domingo 26 de abril el funcionamiento del sistema de “semáforo” epidemiológico, ideado como estrategia para el levantamiento paulatino y regulado en su país de las restricciones de confinamiento por el coronavirus (COVID-19).
Moreno, en un mensaje de radio y televisión, recordó que el próximo 4 de mayo comenzará una nueva fase en el combate contra la pandemia del coronavirus (COVID-19) con la aplicación de una estrategia de distanciamiento social mediante la que su gobierno busca reanudar algunas actividades laborales.
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Aclaró que el cambio de fase dependerá de la decisión de cada gobierno local (municipios), cuya evaluación determinará el nivel del semáforo (rojo, amarillo o verde) que se aplicará en cada jurisdicción.
“Tienen la última palabra. De ustedes depende el control de la disciplina y las medidas de protección para sus ciudadanos. Estimados alcaldes, cuentan siempre con nuestro respaldo para la decisión que tomen”, indicó Moreno.
Sin embargo, Lenín Moreno subrayó que no se ha terminado la situación de emergencia y que se volvería a la etapa de cuarentena o aislamiento domiciliario, masivo y obligatorio, si se detectase algún indicio sobre un eventual rebrote de la pandemia del coronavirus (COVID-19).
Explicó que la aplicación de los diferentes niveles del “semáforo” en la etapa de distanciamiento dependerá de varios factores, como el estado de la curva de contagio y la capacidad de cada jurisdicción para hacer pruebas de diagnóstico.
También la situación de la infraestructura sanitaria disponible en cada municipio, la disminución de las atenciones de emergencia y el nivel de colaboración de la población.
No obstante, Lenín Moreno aclaró que se mantendrán sin variación algunas medidas como el aislamiento obligatorio de los mayores de sesenta años de edad, el cuidado de niños y el cierre de fronteras.
Continuará igualmente hasta nueva orden la prohibición para el transporte público entre las provincias, así como los eventos masivos y las concentraciones de personas.
Se mantendrá la suspensión presencial de clases en escuelas, colegios y universidades, que seguirán con la modalidad de educación virtual a través de internet, agregó el presidente para favorecer el comercio en línea.
En el nivel amarillo, las empresas, bajo estrictas medias sanitarias, podrán funcionar con la mitad del personal, el transporte urbano se reanudará parcialmente y se ampliará a dos días a la semana la posibilidad de circulación de vehículos particulares, que ahora sólo pueden hacerlo un día.
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En el nivel verde, las instituciones públicas y privadas podrán trabajar con hasta el 70 % del personal y con horarios diferenciados, se abrirán algunos comercios y se permitirá la movilización de personas con algunas normas sanitarias.
Lenín Moreno reiteró que son las autoridades locales las que ayudarán al Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional a tomar las mejores decisiones y que por ello ha dispuesto que ese organismo convoque cuanto antes a una reunión virtual con todos los alcaldes del país para explicarles la situación.
Además, el COE nacional entregará a los COE locales la información precisa sobre la pandemia.
“Con esos insumos, serán las autoridades locales quienes tengan la última palabra y las que indiquen si hay que iniciar o no esta segunda fase de distanciamiento social en cada jurisdicción", remarcó el presidente ecuatoriano.
Lenín Moreno conminó a las autoridades locales a que comuniquen su decisión al COE nacional hasta el próximo viernes.
El alcalde de Quito, Jorge Yunda, ha sido una de las autoridades locales que ha solicitado que se mantenga la cuarentena, mientras que al Federación de Médicos de Ecuador ha pedido al Gobierno que no dé aún paso a la fase de distanciamiento social, por considerar que aún no hay las condiciones para ello.