Científicos a cargo de la vacuna rusa Sputnik V contra el coronavirus destacaron este viernes 4 de septiembre que sus dosis otorgan una inmunidad superior a la de personas que se recuperaron de la enfermedad COVID-19, informaron medios locales.
La respuesta inmune de los voluntarios “es suficiente para contrarrestar cualquier concentración imaginable de COVID-19”, dijo el director del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, Alexánder Guíntsburg, durante una rueda de prensa.
Mientras que en un comunicado conjunto el centro y el Fondo de Inversión Directa de Rusia (RFPI, por su sigla en ruso) sostuvieron que quienes han probado la Sputnik V desarrollaron respuesta inmunológica estable con un nivel de anticuerpos 1,5 veces mayor que las personas que superaron la COVID-19.
Inclusive hicieron una comparación con la destacada vacuna de la Universidad de Oxford y AstraZeneca, cuyo nivel de anticuerpos provocado en sus voluntarios fue igual al de los que generaron los recuperados de coronavirus, añadieron los expertos rusos.
Este viernes 4 de septiembre Rusia completó uno de los pasos que le solicitaba la comunidad científica internacional, divulgó sus estudios acerca de la vacuna para que fuesen revisado por pares. En la prestigiosa revista The Lancet se apuntó que la Sputnik V generó respuesta inmune en todos los voluntarios.
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Se trata de la “dosis óptima segura, que permite lograr una respuesta inmunológica eficaz en la totalidad de los vacunados, incluso en aquellos que han tenido recientemente una infección por adenovirus”, señalaron investigadores de Gamaleya citados por la agencia Sputnik.
Conoce las fases de desarrollo de una vacuna. Foto: La República.
La vacuna rusa, la primera registrada en el mundo, a diferencia de otros proyectos fue creada de forma artificial sin ningún elemento del SARS-CoV-2 en su composición. Utiliza dos adenovirus humanos —con dos dosis— que son transformados para agregar el coronavirus.
En ese sentido, determinaron que “gracias al uso de dos vectores diferentes, basados en los serotipos 5 y 26 del adenovirus humano, es posible lograr una respuesta inmunológica más efectiva, ya que cuando se usa el mismo vector en dos vacunas, el sistema inmunológico desencadena mecanismos de defensa y comienza a generar rechazo con la segunda inyección”.
“La vacuna Sputnik V evita el posible efecto neutralizante. Al mismo tiempo, otras vacunas basadas en un solo vector no proporcionaron un nivel de anticuerpos más alto que el de las personas que ya han superado el COVID-19”, afirmó el RFPI.