La dura historia del joven que sobrevivió al atropello de un tren en Ate: vive en un cementerio y lucha por vencer su alcoholismo
El caso de Gian, un joven que sobrevivió milagrosamente tras ser arrollado por un tren en Ate, revela una dura historia de adicciones y lucha familiar. Su madre no pierde la esperanza de verlo recuperado y lejos de las calles.
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A inicios de marzo, un suceso impactante conmocionó a todo el Perú. Gian, un joven de 26 años, fue arrollado por una locomotora mientras dormía sobre los rieles del tren en Huaycán, Ate. Milagrosamente, sobrevivió al accidente con heridas leves en el brazo izquierdo. Según las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la zona, el joven se encontraba bajo los efectos del alcohol y no se percató del peligro inminente al quedarse dormido sobre las vías.
Tras el accidente con la locomotora, Gian fue trasladado de emergencia al Hospital de Ate, donde recibió atención médica por las heridas en su brazo. Sin embargo, luego de ser dado de alta, se escapó del centro de salud y no regresó a la casa de su madre ni a la de algún familiar. En lugar de ello, se dirigió a las instalaciones del cementerio 'Asociación de Deudos del Cementerio Jardines de la Paz', donde vive desde hace algún tiempo.
Una vida marcada por la adversidad
Gian es el mayor de cuatro hermanos y, según relata su madre, tuvo una infancia feliz. Sin embargo, al llegar a la adolescencia, comenzó a mostrar comportamientos preocupantes: escapaba de casa durante las noches y frecuentaba lugares peligrosos. Su madre, desesperada, lo buscaba por diversos lugares, incluyendo el río y el cementerio de Huaycán.
Su madre hizo todo lo posible para ayudarle. Durante dos años, pagó S/1.000 mensuales para internarlo en un centro de rehabilitación, con la esperanza de que pudiera dejar las drogas y recuperar su vida. Sin embargo, Gian recaía constantemente en el consumo, lo que no solo afectaba su salud y estabilidad, sino que también generaba un profundo desgaste emocional y económico en su familia. Con el tiempo, ella ya no pudo costear el tratamiento, aunque nunca dejó de luchar por su recuperación.

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"Lo vi que estaba saliendo del tren. Dios le dio una nueva oportunidad como saliera de mi vientre para que él cambie, para que recapacite y reaccione, pero me doy cuenta de que él no reacciona (...) Él me quiere bastante. Quisiera que vuelva a ser el niño de antes, el niño que yo jugaba, que yo abrazaba", compartió su madre en un reportaje para Latina Noticias.
Su madre pide ayuda para su hijo
La historia de Gian es un recordatorio de las luchas internas que enfrentan muchas personas atrapadas en el ciclo de la adicción. Su madre hace un llamado a organizaciones y personas de buen corazón que puedan brindar ayuda para rehabilitar a su hijo y ofrecerle una nueva oportunidad de vida.
"Si alguna ONG o personas que podrían internar o llevarlo a un lugar para que lo limpien su sangre. Si hubiera, yo como mamá permitiría que se lo lleven. Sabría dónde está", reveló la madre de Gian.