Warachikuy, cuando los jóvenes se hacían hombres

Por: Luis Álvarez

Luego de dos años, la efervescencia de la juventud cusqueña se volvió a manifestar en la explanada del Sacsayhuman con la escenificación del ritual inca del Warachikuy, interpretado por los estudiantes del Glorioso Colegio Nacional de Ciencias.

Más de 1.500 artistas dieron vida a la majestuosa ceremonia incaica que representa el paso de la adolescencia a la adultez, en el que los jóvenes pasan por una serie de pruebas de destreza y valor que al final son recompensadas con la imposición de la wara o pantalón, símbolo de que el joven ya está apto para ir a la guerra.

Como hace cinco décadas, los encargados de realizar la ceremonia ancestral son los estudiantes del Glorioso Ciencias, que se preparan con varios meses de anticipación para llegar de la mejor forma al segundo domingo de setiembre, mes de la juventud.

Desde muy temprano, los guerreros partieron de la sede de la institución educativa con destino a la plaza Mayor, donde aguardaron al sumo emperador, el inca, interpretado por el profesor David Ancca, el mismo actor que le da vida al soberano imperial en las fiestas del Inti Raymi. Los adolescentes hacen el recorrido hasta el Sacsayhuman, donde realizan sus pruebas a ritmo de “huk, izkay, kinsa, jay” (uno, dos, tres , arriba), grito de guerra para darse valor.

Enormes palos y sogas firman una especie de ring de pelea para el enfrentamiento de los futuros solados, que llegaron a la fortaleza desde los cuatro suyos del imperio. El vencedor gana la wara y se hace hombre para ir a la guerra .

Esta escenificación está basada en las crónicas del Inca Garcilaso de la Vega, que en su obra relata cada etapa del Warachikuy, y su importancia en la sociedad inca, caracterizada por ser conquistadora.

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