La encuesta GfK coincidió en parte con la interpelación y renuncia de Vizcarra así como con el informe de la Contraloría. Los seis puntos menos en la aprobación del presidente deben estar vinculados, en alguna medida, a este proceso. El tema de la reconstrucción, que ayudó al gobierno a tomar aire en la relación con el Fujimorismo, ha descendido de lugar en la agenda. Si tomamos como indicador lo que la gente dice que le gustaría escuchar en el programa de PPK (que muchos evalúan bien pero que según el rating pocos ven) la reconstrucción aparece en séptimo lugar. Las fricciones con el Congreso vuelven al centro del escenario político. Casi todos descienden en su nivel de aprobación (ministros, Congreso, principales bancadas) salvo los hermanos Fujimori que la mejoran (42% Keiko y 33% Kenji). Como señalaba ayer Eduardo Dargent, parece que estas pugnas no los afectan, ni siquiera las internas (60% dice que las discrepancias al interior de Fuerza Popular revelan problemas de fondo). El peso de la asociación con Alberto Fujimori debe ser importante en ese parecer, un 58% está de acuerdo con su liberación a través de un hábeas corpus. Mientras tanto, en un parlamento donde Kenji Fujimori parece ser la cabeza de la oposición al poder… en el Congreso, las agrupaciones se siguen desgastando. En estos días, donde se debería debatir la reforma electoral, es bueno tomar en cuenta que solo el 11% dice sentirse representado por algún partido y que, por lo tanto, algo se tiene que hacer. Hemos evaluado de manera general y en determinados aspectos las principales bancadas y las noticias no son halagüeñas. El fujimorismo sale mejor evaluado, en términos relativos, y está más asociado a un rol fiscalizador pero la asociación de todos con ideas como: está buscando lo mejor para el Perú y tiene un plan claro para el desarrollo del país, son muy bajas. El ruido en el Congreso no deja escuchar la calle. ❧