Estados Unidos. Sostuvo que lo hará porque la tierra y el agua significan vida. También por los que cayeron en Celendín y Bambamarca, y por los que están luchando en Cajamarca., Ataviada con su conocido sombrero cuartillo, Máxima subió lentamente al escenario del Teatro de la Ópera de San Francisco, en California, para recibir el importante premio ambiental Goldman 2016. No dio el tradicional discurso de agradecimiento. Ella prefirió entonar una copla, típico género cajamarquino, de la que es autora: La jalqueñita. PUEDES VER: Máxima Acuña tras recibir Goldman: "No tengo miedo al poder de las empresas" Lo hizo a capela y en medio de un silencio expectante. "Yo soy una jalqueñita, que vivo en las cordilleras. Pasteando mis ovejas en neblina y aguacero. Cuando mi perro ladraba, la policía llegaba. Mis chocitas las quemaron, mis cositas las llevaron. Comidita no comía, solo agüita yo tomaba. Camita yo no tenía, con pajitas me abrigaba. Por defender mis lagunas, la vida quisieron quitarme. Ingenieros, seguritas, me robaron mis ovejas, caldo de cabeza tomaron, en el campamento de Conga. Si con esto, adiós, adiós, hermosísimo laurel, tú te quedas en tu casa, yo me voy a padecer", dice la canción que relata la batalla que libra día a día ante el intento del consorcio minero Newmont-Buenaventura de desalojarla y entrar a la Laguna Azul, que forma parte del proyecto Conga. Al concluir su canto, dijo a los asistentes: "Por eso yo defiendo la tierra, defiendo el agua, porque eso es vida. Yo no tengo miedo al poder de las empresas. Seguiré luchando por los compañeros que murieron en Celendín y Bambamarca y por todos los que estamos en lucha en Cajamarca". Luego levantó el brazo derecho, serenamente y en silencio. Los asistentes se pusieron de pie para vitorearla y brindarle un largo aplauso. Máxima descendió con el trofeo en las manos a tomar su lugar en la primera fila del Teatro de la Ópera de San Francisco, donde la esperaba la abogada Mirtha Vásquez. Por la laguna azul Al acto de premiación de la campesina cajamarquina le precedió un video que empieza mostrando una hermosa imagen de la Laguna Azul. Al borde del espejo de agua Máxima le canta: "mi lagunita Azul me protege la vida...". Luego los asistentes vieron las agresiones de las que ella es víctima del personal de seguridad de la empresa minera. También su arenga a los comuneros en una de las protestas contra el proyecto Conga. Les recuerda que ella está enfrentando a la empresa minera pasando mucho sufrimiento y que deben levantarse en una sola voz de protesta. Defiende su vida pacífica Tras conocer que Newmont había decidido retirar el proyecto Conga de su lista de reservas, Máxima Acuña manifestó que ella tenía un simple deseo: "Quiero regresar a la vida pacífica que tenía en mis tierras junto a mi familia, como la teníamos por casi 20 años”, expresó. Para hoy miércoles, se le ha reservado entrevistas con políticos y congresistas norteamericanos, en la ciudad de Washington.