Juan Francisco Dávila. Economista de profesión, ganador de la VI Bienal de Poesía Infantil ICPNA con Amazonía, libro que presentará en la Feria Ricardo Palma.,Como economista, en sus tareas de marketing, siempre está buscando que los productos gusten y se consuman. Ahora, como autor de poemas para niños, el desafío es más grande, espera que los niños acepten sus poemas. Juan Francisco Dávila acaba de publicar Amazonía, libro con el que ganó el concurso de poesía para niños del ICPNA. El libro, en edición bilingüe, con animadas ilustraciones de Daniella Graner, en realidad, es un hermoso bestiario amazónico, en el que se presenta una galería de animales como el loro, tucán, ronsoco, piraña, mono, bagre, tapir, hasta mosquitos. Los poemas intentan describirlos vivamente en sus rasgos más esenciales. PUEDES VER Lindsay Lohan es blanco de burlas en Twitter por aspecto de una mujer mayor [FOTOS y VIDEOS] ¿Conoce a algunos in situ?... Sí. La primera vez que estuve en la selva fue cuando tenía 9 años. En esa época, los albergues no tenían las comodidades que tienen ahora. Dormíamos sin paredes, había una cortina, nada más. Todas las noches, recuerdo, entraba una tarántula. ¿No le ha dedicado un poema? Sí había uno dedicado a la tarántula, pero al final no lo incluí. Pero en esa oportunidad, conocí a muchos animales. Allí vi que el tucán, con su gran pico, espantaba a todas la aves. Lo respetaban mucho. Cada poema retrata a un animal. Sí, algunos son un retrato del animal. Algunos están puestos en clave irónica, por ejemplo el del tucán. El poema del tucán recrea el verso quevediano “Érase un hombre pegado a una nariz...”. Es la ironía del soneto del hombre de gran nariz. Se me ocurrió que era la manera de poder representar al tucán a través de este verso. Solo un poema cuenta una historia, el del bagre, un remake del “El bagrecico” de Francisco Izquierdo Ríos Sí, está inspirado en ese cuento. Es un bagre que va desde un lugar de la Amazonía peruana, llega al Amazonas, va hacia el Atlántico, pero, en este caso, prueba el agua de mar y no le gusta, regresa a su casa. ¿Cuál es el tino para escribir poesía para niños? Yo entiendo que a los niños les encanta la musicalidad. Les gusta mucho la rima. No ha caído en la moraleja. La moraleja puede estar implícita. Lo que no puedes hacer es ponerla muy explícita. La moraleja es un atentado al goce de la literatura. Cuando a un niño no le gusta un libro, lo deja sin más. Sí, a mí me pasó cuando era niño. Yo leí El Principito siendo muy niño, me encantó, lo terminé. Luego vino Platero y yo, de Juan Ramón Jiménez, y no lo pude acabar, no porque sea malo, es precioso, sino que es muy difícil para un niño de 6 años. Sí, puede pasar lo mismo. El lector más exigente es el lector infantil. Espero que este libro le guste, además es cortito. Si hay críticos más honestos, son los niños... Claro. Llevándolo un poco al marketing, que es mi tema, pasa lo mismo. El público más exigente es el infantil, porque si a ellos no les gusta algo, simplemente no lo consumen. Datos Amazonía se presenta el viernes 9 de noviembre en la Feria Ricardo Palma, sala Martín Adán. 4 p.m. Comentarios de Doris Agurto y Heriberto Tejo. El autor. Nació en Lima, 1973. Licenciado en Economía. Ha publicado Sirenas del arenal y fue finalista del Premio Barco de Vapor Perú.