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Sociedad

Arequipa: piden segunda oportunidad para 16 universidades no licenciadas

Uno de los motivos por los que este grupo de estudiantes piden una segunda oportunidad, es porque cientos de universitarios abandonaron sus estudios tras el cierre de sus instituciones.

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César Vera, secretario representante de la macroregion sur de la Federación de Estudiantes del Perú, dio su postura. Foto: Alexis Choque/URPI

Un grupo de integrantes de la Federación de Estudiantes del Perú (FEP) en Arequipa, se mostraron a favor de los proyectos de ley con los que el Congreso buscaría darle una segunda oportunidad a las universidades no licenciadas, pero con excepciones.

Para el secretario representante de la macroregión sur de la FEP, César Vera, la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) debería dar una segunda oportunidad para 16 universidades asociativas sin fines de lucro.

Para el representante, la diferencia de estas universidades con otras privadas, es que estas no tenían dueño y fueron los malos rectores quienes lucraron con el dinero de los estudiantes y terminaron en actos de corrupción. “No queremos que se de una oportunidad a las más de 40 universidades no licenciadas, sino sólo a 16 porque sabemos que las otras se manejan con intereses económicos y políticos”, indicó Vera.

Para esta federación, las instituciones que deberían tener una segunda oportunidad son la Universidad Andina Néstor Cáceres Velásquez y la José Carlos Mariátegui de Moquegua, en el caso del sur. También piden una nueva oportunidad para la Universidad San Pedro de Chimbote, la Universidad Privada de Pucallpa, entre otros.

Abandonaron estudios

Uno de los motivos por los que este grupo de estudiantes piden una segunda oportunidad, es porque cientos de universitarios abandonaron sus estudios tras el cierre de sus instituciones.

Vera puso de ejemplo la Universidad Andina. Indicó que antes del cierre eran 30.000 estudiantes en las ciudades de Puno, Juliaca y Arequipa. El año 2020 sólo continuaron sus estudios 10.000, otros 5.000 se trasladaron a otras casas de estudio y del resto no saben nada.

“No se imaginan cuanto dinero le cuesta a un estudiante cambiarse a otra universidad, todos los papeles que debe hacer. Además, las universidades nacionales no han aumentado sus plazas, a dónde quieren que vayan todos los estudiantes afectados”, agregó Vera.