Muchas de las reformas políticas (o contrarreformas) impulsadas desde el Parlamento abrazaban el objetivo del fortalecimiento de los partidos nacionales. Pues bien, para las elecciones subnacionales del presente año, podría haber una mayor participación no desde los partidos, sino de los movimientos regionales.
Según información oficial de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), son 17 los partidos políticos que presentaron la información sobre las convocatorias para sus elecciones internas. Es decir, son 17 los partidos que participarán en las elecciones regionales y municipales del 2022.
Se trata de cinco partidos menos, en comparación con los comicios descentralizados del 2018, cuando participaron 22.
Esta reducción, sin embargo, no representa el debilitamiento de los partidos. Al contrario, el objetivo ha sido siempre tener menos partidos, pero con una participación efectiva de sus afiliados.
En tal sentido, si los partidos se fortalecen o no en las elecciones de este año dependerá, en parte, de la cantidad de listas que presenten. En el 2018 fueron 272 listas regionales inscritas desde los partidos políticos.
Ahora bien, las reformas tenían también como objetivo reducir los movimientos, para que los cuadros políticos locales se incorporen a los partidos.
Esto parece no haber ocurrido para las elecciones de este año. A diferencia de los comicios regionales y municipales del 2018, cuando participaron un total de 110 movimientos, para la contienda de este año la cifra se ha incrementado a 151.
Según la ONPE, son 151 los movimientos regionales que cumplieron con convocar a elecciones internas. Se trata, entonces, de la cifra de movimientos que participarían en las elecciones del 2022.
El especialista en derecho electoral José Naupari apunta que la cifra podría bajar ante algunas eventualidades. “Podría ocurrir que un movimiento no logre presentar su lista dentro del plazo que vence el 9 de abril. O podrían no tener actualizados sus órganos electorales y eso les impide obtener el usuario para inscribir sus listas”, explica.
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Son cuatro las regiones con el mayor número de movimientos para el 2022: Tacna (12), Puno (11), Loreto (10) y Arequipa (10). En contraste, cuatro regiones tiene pocos movimientos: Ica (2), Lambayeque (2), Cajamarca (3) y Madre de Dios (3).
Por otro lado, para seguir con vida, estos movimientos deben alcanzar ciertos requisitos en los comicios del 2 de octubre.
José Naupari precisa que, además del deber de participar con listas regionales, deben presentar listas municipales al menos en 2/3 de las provincias y 2/3 de los distritos de la región.
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Asimismo, deben alcanzar al menos el 8% de votos válidos en la elección regional y colocar al menos un consejero. No cumplir estos requisitos conlleva a la pérdida de inscripción.
Inscripción. Los partidos y movimientos tienen plazo hasta el 9 de abril para presentar sus listas de precandidatos.
Las internas. Las elecciones vía un afiliado, un voto, se realizarán el 15 de mayo. Y el 22 será a través de delegados.
Existen muchos incentivos para la proliferación de movimientos regionales: la debilidad y descrédito de los partidos nacionales; la alta fragmentación de la votación en el pasado, lo que crea la expectativa de no necesitar un alto porcentaje de votos para ganar; y la existencia de intereses regionales —formales, informales e ilegales— que buscan influir en los gobiernos subnacionales, financiando candidaturas poco preocupadas en el interés público, con su correlato de corrupción y mala calidad de los gobiernos.
De otro lado, un factor circunstancial es que el número de partidos nacionales se ha reducido tras la aplicación de la valla electoral en las últimas elecciones. Un fenómeno similar esperamos ocurra tras estas elecciones, pues los movimientos, para mantener su registro, deben garantizar un mínimo de participación (regional y municipal), un mínimo de representación (1 consejero) y un 8% de la votación válida en la elección regional.
Infografía - La República
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