Texto y fotos: John Reyes
Descarte
En el tópico del albergue se mide la presión, se toman muestras de sangre y se evalúa a los nuevos huéspedes. Es un equipo multidisciplinario el que los atiende. Son 60 profesionales para 122 personas en estado de abandono. La policía llevó a este anciano al refugio, usa silla de ruedas, así que era difícil que llegara por su propia cuenta. Las personas que tienen alguna patología que no sea COVID-19 son monitoreadas por un equipo de médicos.
Pabellones
Hay una gran carpa instalada en el centro del ruedo, tiene ocho grandes habitaciones. A los lados tiene otras cuatro carpas pequeñas, cada una tiene seis camas.
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Desinfección
Esta es el área de evaluación psicológica. Se desinfecta después de cada uso. Con la presencia del coronavirus, los médicos y enfermeros no quieren correr riesgos.
Traslado
La policía identifica personas en estado de abandono y las lleva al albergue. Si no reúnen los requisitos para quedarse en Acho, son evacuadas a otros refugios.
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Colas
Muchas personas acuden al albergue buscando un espacio. Primero deben pasar por una evaluación. Ahora se está priorizando la atención de ancianos y personas con alguna discapacidad.