En octubre de 2015 la oenegé Oceana pidió la cancelación de la segunda temporada de pesca de anchoveta. Su pedido no fue escuchado, perjudicando a la especie por las razones que se exponen en este artículo. ,En octubre del año pasado los informes científicos internacionales anunciaban que el fenómeno El Niño sería uno de los más fuertes de la historia. En esa coyuntura incierta, empezó a debatirse la viabilidad de una segunda temporada de anchoveta, recurso que desde meses atrás mostraba signos de debilidad. A pesar de las dudas, esta fue autorizada. PUEDES VER: El Niño provocó que la anchoveta y la pota se alejen de zonas de pesca En ese momento, la oenegé Oceana hizo un llamado al Ministerio de la Producción (Produce) y a la opinión pública, para que se suspendiera la apertura de la segunda temporada de pesca de anchoveta del stock norte-centro. El pedido no fue escuchado por Produce, a pesar de que el Instituto del Mar del Perú (IMARPE) difundió información respecto a que el aumento de la temperatura oceánica había reducido la disponibilidad de alimento para la anchoveta, razón que limitó su reproducción e hizo que las poblaciones se desplazaran mar adentro en busca de bolsones de agua fría. Después de lo sucedido, Oceana presenta su evaluación sobre al estado actual de la población de anchovetas y reafirma las razones por las que nunca se debió aperturar la segunta temporada de pesca. Los desembarques reales fueron superiores a la cuota oficial La descarga total de la segunda temporada fue de 1´083,616.98 toneladas métricas de anchoveta, equivalente al 97,62 por ciento de la cuota asignada por Produce. Sin embargo, se estima que el porcentaje de pesca no contabilizada fluctuó entre el 10 y 20 por ciento. Esto revela que la pesca real fue aproximadamente de 1,3 millones de toneladas métricas, cifra superior a la cuota recomendada. El rendimiento ha sido menor en comparación a temporadas anteriores A pesar de que se alcanzó el límite de la cuota, esta ha sido cubierta de una manera más lenta que en años anteriores. Esto puede deberse a la baja disponibilidad de la especie, la presencia de muchos juveniles y el menor peso y contenido graso de cada individuo; signos evidentes del impacto de El Niño en la anchoveta. Las capturas contenían proporciones ilegales de juveniles Según datos previos a la apertura de la segunda temporada, dos de cada tres anchovetas pescadas tenían un tamaño menor al límite legal de 12 centímetros. Durante toda el proceso, la proporción de juveniles en la pesca aumentó progresivamente hasta llegar a niveles extremos en enero. Se reportaron altos índices de cierres e infracciones En esta temporada Produce cerró preventivamente 66 zonas de pesca y dispuso la suspensión de otras 44, alcanzando un total de 110 zonas cerradas temporalmente, debido a claros signos de estrés en la población de anchoveta. Además, el 85 por ciento de las infracciones fueron por exceso de juveniles en los desembarques.