Poder Judicial: ¿puedo perder mi propiedad si alquilo mi local para venta de celulares robados?
¡Atención! Ten cuidado con alquilar tu local comercial a cualquiera porque podrías enfrentar problemas judiciales. Conoce más detalles en esta nota de La República.
El Poder Judicial anunció que los locales comerciales que se alquilen para la venta de celulares podrían ser incautados. El encargado de explicar la medida fue Eduardo Torres Vera, juez especializado en extinción de dominio, quien detalló que se han reportado que muchos stands, tiendas y establecimientos son usados para la venta de productos robados, entre ellos los teléfonos móviles.
De acuerdo con la información brindada por el magistrado, esta figura jurídica se aplica también a quienes alquilen su propiedad como cochera de autos robados, almacenamiento de droga o en locales donde se halla medicina adulterada.
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Torres Vera indicó que las propiedades que son utilizadas para fines ilícitos —como los mencionados líneas arriba— u otras irregularidades, podrán ser incautadas por el Subsistema Nacional Especializado en Extinción de Dominio del Poder Judicial.
Vale mencionar que la sanción judicial es para los dueños que persisten en cubrir de alguna forma diversos tipos de delitos a pesar de que se les ha advertido sobre el uso ilícito que se le está dando a su propiedad. El Poder Judicial considera esto como un agravante a la situación legal del acusado.
“Si hay una continuidad sobre esa situación (alquiler) pueden perder (su propiedad) porque están albergando bienes ilícitos o que han sido robados y están instrumentalizando esas viviendas para ese fin. Mi recomendación a la población, como operador de justicia, es que no alquilen o alberguen instrumentos o bienes que tienen orígenes ilícitos. De lo contrario, su propiedad va a ser incautadas”, dijo el juez especializado en extinción de dominio.
Finalmente, Torres Vera manifestó que, antes de que se habilite esta figura jurídica, las tiendas o locales que alquilaban su espacio para venta de fines ilícitos solo recibían una sanción, pero luego volvían a abrir.