Así extorsionan a los profesionales de la salud: las nuevas víctimas del crimen en Trujillo
Testimonio. Hampones exigen entre 5.000 y 10.000 soles cada mes a médicos y odontólogos para dejarlos trabajar.
“Por lo visto te va bien en tu centro odontológico. Si quieres seguir tranquila, tienes que colaborar con la ‘batería’: 10.000 soles por la seguridad tuya y de tu familia. Sé inteligente y colabora, porque nos ponemos más empeñosos y mando un suicida a que te ponga tres dinamitas en tu ‘jato’”, se lee en uno de los mensajes extorsivos que recibió una odontóloga trujillana de 30 años.
La extorsión es uno de los delitos más frecuentes en la región La Libertad, sobre todo, en la ciudad de Trujillo. Este 2022 se han registrado 1.437 denuncias, de las cuales 1.072 han sido resueltas, según las estadísticas de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Como parte de su testimonio, la agraviada contó que se contactaron con ella a través de WhatsApp y que, además de los escritos, le enviaron dos videos. En ambos, los supuestos facinerosos hacían gala de sus armas de fuego y vertían una serie de improperios para amedrentar.
“A mí me mandaron un mensaje por WhatsApp con mis datos, mi nombre completo. Me pedían 10.000 soles y me decían que busque a alguien para que se contacte con ellos. Nunca le contesté”, reveló la profesional a este diario. Esto le ocurrió el último 12 de noviembre. Cuando acudió a poner la denuncia, los policías le dijeron que una de las formas en que estos sujetos obtienen los datos es a través de las publicaciones en redes sociales.
Con armas intentan generar miedo en la víctima de extorsión. Foto: captura/difusión
El jefe de la Divincri de Trujillo, Javier Méndez, explicó que los miembros de estas bandas captan la información por el Facebook, Instagram u otras redes. “A veces ponemos información relacionada con nuestro medio social, pero también personas que tienen negocios y profesiones la publican como publicidad”, aseveró.
Esto quiere decir que estas personas revisan de manera aleatoria y si encuentran algún número de contacto que figure de los centros médicos u odontológicos lo aprovechan para extorsionar.
“Pasar corriente”
El periodista y escritor especializado en temas policiales, Charlie Becerra, autor de la biografía de ‘Gringasho’, explica que esta modalidad dista sobremanera de las extorsiones más “profesionales”, donde el detalle de la información con que asustan a las víctimas es más preciso.
Charlie Becerra, reconocido escritor trujillano. Foto: sientetrujillo.com
“La virtualidad nos obliga, sobre todo, a los que guardamos un trabajo muy cercano con el público, a estar ubicables en las redes. Eso trae consecuencias: no solo estamos ubicables para nuestros clientes, sino también para gente que tiene malas intenciones (…) y lo que está proliferando ahora son las extorsiones que tienen por nombre ‘pasar corriente’”, dijo.
No es más que tirar el anzuelo y esperar a que alguien caiga. “Es tirar la mayor cantidad de llamadas echando mano de algunos pocos datos encontrados en las redes sobre la persona a la que están llamando. A veces en una foto de Facebook, en una etiqueta, en un comentario, pueden ellos detectar o recolectar algún dato que le puedan servir”, delineó mucho mejor Becerra.
Inclusive se conoció que muchos de los videos donde se muestran las armas suelen ser los mismos que les llegó a otra víctima que no cayó.
Denuncias
La Policía señaló que este año ha habido casos de odontólogos, médicos cirujanos e ingenieros a quienes les exigían entre 5.000 y 10.000 soles a cambio de dejarlos ejercer su trabajo. “En estas extorsiones, en su mayoría, el 90%, (los responsables) han sido capturados”, expuso Méndez, pero recalcó la importancia de denunciar el hecho para que se pueda hacer una investigación con las herramientas de geolocalización o la ejecución de negociaciones que deriven en su captura.
Javier Méndez, jefe de la Divincri Trujillo. Foto: URPI Trujillo/LR
“De repente, a mí me llamaron de un número que es el mismo que utilizaron para llamarte a ti. Allí la Policía puede tener una coincidencia en horas o en el tipo de discurso, hay muchos factores que pueden ayudar a contrarrestar este tipo de tácticas. Lo otro es mantener la calma, porque en el momento en que esta gente nos mete el miedo, ya tiene la partida casi ganada”, finalizó Becerra, quien curiosamente fue víctima de un intento de extorsión el 13 de diciembre.