Los familiares de Machiavelli Laura Lume (43), el empresario del rubro de transporte que fue asesinado por sus secuestradores en Santa Anita, lloran y exigen justicia. “Había cumplido muchas metas , pero aún tenía un sueño que le faltaba y que este año pensaba cumplir: el ser padre”, dijeron entre lágrimas.
Ahora, los sueños de toda la familia Laura se fueron con la muerte de ‘Machi’, como le decían de cariño, y ya no se sienten seguros y quieren dejarlo todo.
Laura es una empresa de transporte que se inició hace cerca de 20 años. Fue formada por los nueve hermanos que llegaron a Lima escapando de la violencia terrorista que los aquejaba en Huancavelica. “Todos vivíamos con precariedad, pero siempre con la mente de salir adelante”, dijo el sobrino de la víctima.
Ahora, por temor, no descartan venderlo todo y empezar de nuevo, como ya lo hicieron hace mucho, pero en el extranjero, donde esperan que la violencia no los alcance esta vez.
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Según cuentan, hace un mes, el hermano mayor de los Laura recibió mensajes amenazantes exigiéndole la suma de 5.000 soles. “Todos tus movimientos están vigilados”, decía. Decidieron en familia hacer caso omiso.
Durante los últimos meses fueron víctimas de distintos robos y hasta un intento de asalto dentro de sus instalaciones.
Los deudos cuentan que hace unos días accedieron a los videos de unas cámaras de seguridad donde se registró el secuestro de ‘Machi’ cuando él salió de su departamento de la avenida Faraday, en Ate.
Sin embargo, en la comisaría del sector no recibieron el apoyo de la PNP. “Fue una pérdida de tiempo, ya que nunca vimos que se activará algún plan de rescate”, contaron.
Tras ello, sucedió el crimen.
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El coronel PNP Daniel Jares, jefe de la División Policial Este 2, declaró que cinco personas extranjeras fueron detenidas tras el asesinato del empresario cuando intentó huir de sus captores en la calle Sol de Oro, en Santa Anita.
Señaló que tras activar el plan cerco fue ubicado e intervenido el auto color negro que fue utilizado por los secuestradores para cometer el secuestro. Allí cayó un hombre venezolano.
Otros dos sujetos de esa nacionalidad, un colombiano y una mujer venezolana cayeron en la vivienda donde iban a tener al empresario Laura.
Chalecos antibalas, dinamitas, cacerinas, motos y otras especies fueron hallados en un inmueble de Carabayllo, que habría sido guarida de secuestradores.