Las lluvias intensas por el ciclón Yacu han dejado a decenas de personas sin viviendas en el norte del país y en la región Lambayeque no es la excepción. Más de 5.000 personas han sido trasladadas a los albergues temporales habilitados en diversos espacios en los distritos de Pacora, Íllimo y Jayanca, tras los desbordes de ríos de Lambayeque, como el afluente La Leche.
En dichos albergues las personas pasan sus días con la esperanza de reconstruir sus hogares y recuperar sus vidas, aunque con serias limitaciones para llevar de la mejor manera sus actividades. En entrevista con La República, el defensor del Pueblo de Lambayeque, Julio Hidalgo Reyes, dijo que es obligación de los alcaldes distritales mejorar las condiciones de los albergues y entregar la ayuda humanitaria suficiente.
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La Defensoría del Pueblo constató que en los exteriores de la institución educativa n.° 10125 Carmelo Félix Medrano, en el distrito de Jayanca, había 40 personas damnificadas y albergadas en condiciones inadecuadas. Allí, la institución verificó que las personas no contaban con servicios higiénicos, alimentos y cocina para la preparación de sus alimentos. Tras la intervención de la Defensoría, las personas fueron ingresadas al interior del centro educativo.
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“Lo que pedimos a las autoridades locales es emplear los recursos necesarios para garantizar la atención de los damnificados, durante el tiempo en que usen los albergues. En Jayanca se han dado mayores contratiempos, mientras en Íllimo y Pacora se han tomado las correcciones necesarias. El mayor número de población vulnerable son madres de familia y sus menores hijos”, describió Hidalgo.
En el distrito de Íllimo, según la Defensoría del Pueblo, un promedio de 2.000 personas damnificadas se encuentran en albergues acondicionados en colegios, un instituto superior, una iglesia y otros. En el caso del distrito de Pacora, son 3.000 personas damnificadas las que se encuentran en albergues.