Los territorios de soberanía compartida —también conocidos como condominios— representan un modelo político que surge como una alternativa viable para abordar disputas territoriales complejas entre dos o más Estados. Este enfoque implica el establecimiento de un marco jurídico y político en el que dos entidades comparten el control y la administración de un territorio en disputa.
La implementación de la soberanía compartida requiere un alto grado de compromiso y cooperación entre las partes involucradas. Es fundamental establecer mecanismos de diálogo y negociación efectivos
PUEDES VER: Las 2 universidades de América Latina que fundaron los españoles el mismo año: son más antiguas que Harvard
La isla de los Faisanes es el islote que cambia de nacionalidad dos veces al año. Es una isla fluvial que se ubica cerca de la desembocadura del río Bidasoa, cuya jurisdicción es compartida amistosamente entre España y Francia.
Francia y España comparten la isla de los Faisanes. Foto: Blog Cátedra de Historia y Patrimonio Naval
Su superficie actual es de aproximadamente 6.820 m² y se encuentra estabilizada gracias a los trabajos de protección que se llevaron a cabo en la misma.
Estos dos países acordaron encargarse de cuidarla durante seis meses al año cada uno. Además, este territorio es considerado el condominio más pequeño del mundo.
PUEDES VER: La ‘triple isla’ más grande del mundo se encuentra en América: es más grande que Gran Bretaña
La isla de los Faisanes fue un terreno neutral crucial para las negociaciones que pusieron fin a la guerra entre España y Francia, iniciada en 1635. El 7 de noviembre de 1659, se firmó allí el Tratado de los Pirineos, lo cual marcó el fin del conflicto.
Posteriormente, con el Tratado de Bayona de 1856, se firmó un acuerdo amistoso entre ambos países para compartir la soberanía de la isla y evitar así que el islote quedara sin legislación.
La Isla de los Faisanes a principios del siglo XX. Foto: Museo San Telmo
Desde ese entonces, la administración de la isla se alterna entre ambos países, es decir, permanece bajo tutela española del 1 de febrero al 31 de julio y es de dominio francés del 1 de agosto al 31 de enero.
La ceremonia es sencilla y se realiza a las 7.30 a. m., en presencia de una docena de personas, dado que se trata de una muy pequeña superficie.
PUEDES VER: El único país del mundo que celebra 2 días su independencia está en Sudamérica: tiene la moneda más antigua
Actualmente, la isla permanece inhabitada, sin conexiones mediante puentes a tierra firme y no es accesible al público. La Policía de España y de Francia se encarga de vigilar el islote para evitar la entrada de visitantes no autorizados.
Esta vigilancia es especialmente rigurosa en el lado español, ya que el escaso caudal del río Bidasoa permite que las personas puedan cruzarlo a pie.
La isla de Faisanes no se encuentra habitada. Foto: Turismo de Hendaya
A pesar de ello, la isla de los Faisanes puede ser visitada durante la ceremonia de entrega, que se realiza dos veces al año, o mediante recorridos organizados.
Para preservar el estado de la isla, los ayuntamientos de Irún, en España, y de Hendaya, en Francia, se encargan tanto de su limpieza como de su mantenimiento.
El nombre ‘Faisanes’ no se debe a las aves, sino a la expresión ‘faiseurs de paix’ (artífices de paz). Como se indicó líneas arriba, este lugar fue testigo de la firma del Tratado de los Pirineos en 1659, que terminó con la guerra entre las coronas de Francia y España. Además, al año siguiente, aquí se rubricó el contrato matrimonial entre la Infanta María Teresa y Luis XIV.
Ilustración del tratado de Pirineos. Foto: Biblioteca Nacional de Francia