una esperanza de paz. Kim Jong-un, de Corea del Norte, y Moon Jae-in, de Corea del Sur, se reunieron en la frontera común.,EFE y AFP. Lo que parecía imposible se hizo realidad. El líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, protagonizaron un histórico encuentro en la frontera entre los países.Kim Jong-un pasó la línea convirtiéndose en el primer líder norcoreano en cruzar al Sur desde que en 1953 acabó la guerra de las dos Coreas.Antes de que Kim cruzara, él y Moon se dieron un apretón de manos e intercambiaron palabras. Cuando Kim ya se encontraba en el Sur se produjo otro emotivo momento cuando se le invitó a Moon a cruzar juntos de nuevo la divisoria hacia el Norte, lo que hicieron sonrientes. De vuelta en suelo surcoreano, ambos fueron recibidos con flores por dos niños surcoreanos.Kim y Moon caminaron a pie hacia la Casa de la Paz en Panmunjom, donde se firmó el armisticio de 1953 y donde se celebra la cumbre. El jueves, el jefe de la presidencia surcoreana, Im Jong-seok, advirtió que el panorama que espera a los dos líderes no es fácil. “Alcanzar un acuerdo de desnuclearización en un momento en que los programas nucleares y de misiles intercontinentales (ICBM) de Corea del Norte están tan avanzados va a ser fundamentalmente diferente de la naturaleza de los acuerdos alcanzados en la década de 1990 y a principios de 2000”. Optimistas, pero...Muchos analistas son optimistas, aunque consideran improbable que se alcancen resultados muy concretos a corto plazo.“El año pasado fue uno de los más peligrosos de las últimas décadas. Mucha gente subestima lo cerca que estuvo de estallar una guerra en Corea”, señala Andrei Lankov, profesor de Estudios Coreanos de la Universidad Kookmin.Los observadores coinciden en que este cambio radical ha sido posible por una “conjunción de factores” que incluye la voluntad de supervivencia del régimen norcoreano y los “papeles complementarios” que han desempeñado los líderes del Norte y del Sur, así como Donald Trump.El asesor del presidente surcoreano Kim Joon-hyung cree que los pasos y compromisos concretos “deben detallarse más adelante”, y que en la cumbre del viernes lo esencial es enviar “un fuerte mensaje conjunto” en esa dirección.❧Es un momento irrepetible para la pazLos analistas más positivos creen que sean cuales sean las verdaderas intenciones del hermético régimen norcoreano se trata de un “momento irrepetible” para lograr una paz duradera.“Kim Jong-un ha sido muy coherente desde que asumió el poder. Su objetivo siempre ha sido mejorar la vida de los norcoreanos y lograr el desarrollo económico del país, y eso lo podría conseguir accediendo a desnuclearizarse”, afirma un experto.Entre las concesiones que Pyongyang podría obtener a cambio figuran una relajación de las sanciones internacionales que pesan sobre el régimen, la reanudación de la cooperación económica con el Sur o una reducción de las maniobras militares de Seúl y Washington.“Habrá que esperar 5 o 10 años para ver si esta cumbre ha tenido éxito”, dice Lankov.