Tragedia en Chiclayo. La esposa del propietario del local y sus dos menores de 10 y 13 años fueron hallados sin vida en un baño. Inquilinos usaron un cable para escapar del fuego a través de techo.,Madre gestante y sus 2 hijos más otras 4 personas mueren en incendio,Madre gestante y sus 2 hijos más otras 4 personas mueren en incendio,La informalidad, de nuevo, trajo destrucción y dolor, frustró sueños y segó vidas. Esta vez ocurrió en el distrito chiclayano de José Leonardo Ortiz, en Lambayeque. Siete personas, entre ellas tres menores y una mujer embarazada, fallecieron durante un voraz incendio que consumió un edificio multifamiliar de cinco pisos. PUEDES VER Incendio en Chiclayo: Así fue el rescate de inquilinos del edificio multifamiliar en José Leonardo Ortiz [VIDEO] En el primer nivel del inmueble, según han confirmado representantes de la comuna local, funcionaba un almacén informal de espuma para colchones. Allí inició el fuego, la pesadilla, la tragedia. Cerca de las 7:30 de la noche, al notar el humo y al verse sin salida, las 12 familias que allí vivían, entre ellas algunos inquilinos, subieron hasta la azotea, pero no todos lograron escapar. Durante la diligencia realizada por la Fiscalía, tres de los cadáveres fueron hallados en el baño de un minidepartamento. Una de esas víctimas era Nibelina Vargas Barrera (30), esposa del propietario del edificio, quien ha sido identificado como Dino Llano Llano. Los otros dos cuerpos eran de los hijos de ambos, el pequeño Ángel (10) y Giovani (13). Nibelina tenía ocho meses de gestación. Los demás fallecidos, según el reporte policial, son Gloria Huamanchumo Castro (60), Jorge Armando Chiroque Guerrero (33), Bernardino Sánchez (78) y la pequeña Abigaíl M. Ch, de solo un año y seis meses. Milagroso escape El fuego había bloqueado la salida. Eran más de 15 personas las que estaban atrapadas en el techo del edificio. Desde allí, con tal de escapar de una muerte segura, tuvieron que vencer el miedo a las alturas. Ayudados por un cable de telefonía, uno a uno descendieron desde una altura de 20 metros hasta llegar a un techo contiguo, donde lograron ponerse a salvo. “Era desesperante, saque la cabeza por la ventana porque me asfixiaba, había un cable de teléfono, lo tuve que arrancar con la ayuda de mis vecinos, lo amarré y comencé a bajar. Hemos bajado mujeres, niños, como 15 personas”, relató Daniel García, uno de los inquilinos. En medio de la tragedia surgió también el heroísmo. El joven Danilo López Daniel (18) logró rescatar a un niño de un año de edad, a quien trató de bajar en brazos. Sin embargo, el cordón se rompió antes de llegar al suelo. Durante la caída, Danilo cubrió al bebé con su cuerpo. El joven terminó con fracturas en el pie derecho, por lo que fue trasladado al Hospital Regional de Lambayeque. También resultaron heridos Carla Rocío Chafloque Flores, con quemaduras en el 50% de su cuerpo; y el pequeño Liam Robin M. Ch. de dos años, con quemaduras de segundo grado en el 18% de su cuerpo; y Homero Ruiz Chuin (20). Acepta su culpa Jorge Luis Saldaña, abogado del empresario Dino Llano, admitió que su patrocinado había cometido una serie de faltas al instalar un depósito de materiales inflamables en un edificio multifamiliar. A pesar de su responsabilidad, culpó también al municipio por no realizar tareas de fiscalización. Tras perder a su familia, Llano contó que su esposa debía ser operada para reducir el riesgo del parto. “Se le había adelantado la fecha del parto y es por eso que estábamos juntando dinero para poder asistirla en el nacimiento de nuestro bebé”, contó. Pasado el mediodía, los deudos de las víctimas llegaron hasta la morgue de Chiclayo, donde encontraron al propietario del almacén. Allí intentaron atacarlo y le reclamaron por no ayudarlos. Llano aseguró que se haría cargo de los gastos del sepelio y enfrentaría los cargos. El Ministerio Público informó que se podrían establecer responsabilidades penales por el presunto delito de homicidio culposo, ya que el depósito no tenía licencia. Hasta el lugar del incendio llegó personal del Departamento de Seguridad del Estado, pues algunos vecinos dijeron que el fuego pudo iniciarse tras el ataque de extorsionadores que exigían a Llano el pago de cupos.