Tecnología de punta. Con maquinaria traída de la India y Estados Unidos se plasma ambicioso proyecto que estaría operativo en la primera quincena de diciembre. Será totalmente mecanizada. Inversión supera los 90 millones de dólares.,En las extensas tierras del proyecto Olmos, en medio del arenal, se levanta la fábrica de azúcar más moderna del país. Están en la etapa final de su construcción, obreros e ingenieros dan los toques para que en breve plazo empiece a funcionar. La planta se construye con maquinaria traída de La India y Estados Unidos, y sus operaciones serán totalmente mecanizadas, con tecnología de última generación. La fábrica no usa trapiche sino un difusor moderno único en el país que permite una mejor extracción de la sacarosa de la caña. Ojo, en el Perú no se construyen ingenios azucareros hace 80 años. Uno de los más optimistas con esta envidiable infraestructura que paso a paso se concreta es el gerente general de Agrolmos, empresa de la Corporación Azucarera del Perú, Héctor Rubina Gastañeta, quien calcula que la fábrica estará operativa en la primera quincena de diciembre. La República recorrió en exclusiva sus instalaciones, los campos de caña de azúcar y conversó con el alto ejecutivo, quien dio detalles del ingreso de esta compañía en el rubro agroindustrial y su experiencia en el proyecto Olmos. ¿Qué es lo más gratificante de haber apostado por sembrar caña en las tierras de Olmos? Hemos cosechado los primeros lotes y los resultados son halagadores. Por ejemplo, en otros lugares donde también siembran caña se manejan con 14 y 15 meses de cultivo, en cambio en Olmos con las variedades que hemos traído y con el riego tecnificado no es más de 12 meses, y apuntamos a tener cinco cortes en ese periodo. Por ahora como nuestra fábrica todavía no está lista, estamos vendiendo el producto a Pomalca, Pucalá y Cartavio. ¿El nivel de sacarosa de la caña es el óptimo? La caña está saliendo con unos niveles aceptables de sacarosa (13%), por lo menos eso se evidencia en los primeros cortes que hemos tenido, creemos que podemos mejorar mucho más por los diferenciales de temperaturas que hay y por la disposición de agua, tranquilamente deberíamos estar pintando en 14%. Nosotros tenemos etapas en la producción: la fase A (inicial), donde hemos sembrado con un sinnúmero de fallas producto de la falta de conocimiento de la zona, tanto en clima, suelo y en las operaciones mismas en el desierto. Pero en el plan B ya se ha hecho mejor, estamos hablando de niveles de 140 toneladas de caña por hectárea (TCH), y la fase C ya lo estamos haciendo mejor y creo que vamos a tener buenos resultados. Nosotros debemos estar manejándonos entre 130 y 140 TCH en doce meses, que es un indicador muy competitivo. ¿Cuál es la inversión que han hecho hasta el momento? Hemos invertido alrededor de 320 millones de dólares entre fábrica (90 millones), campos, infraestructura de riego, material vegetal para la siembra. Esto está dentro de lo que habíamos calculado inicialmente. Hemos construido todas las instalaciones de primer nivel, tanto oficinas como habitaciones, para que el personal esté los más cómodo posible ya que van a trabajar turnos de doce horas y van a estar internados durante una semana en Olmos. ¿La producción de Agrolmos irá al mercado nacional o también para la exportación? Nuestra producción irá al mercado nacional y elaboraremos solo azúcar rubia, todos los subproductos generados en la fábrica los destinaremos para producir materia orgánica, un compus especial para enriquecer nuestros campos y poder abastecer de materia orgánica a otras compañías instaladas en Olmos. Vamos a coberturar las regiones de Lambayeque, Piura, Tumbes, San Martín, y si hay algún tipo de excedente irá al extranjero. El nombre comercial del producto aún no se determina, pero estará relacionado a consolidar la región Lambayeque. ¿Piensan instalar alguna planta productora de papel o de alcohol? Por el momento no lo tenemos como proyecto, solo haremos azúcar rubia, la melaza que salga lo vamos a derivar a otro ingenio que tiene la compañía en Piura (AgroAurora) para producir alcohol. La destilería que hay allá tiene la capacidad de hacer etanol, pero por ahora no es nuestra prioridad y dependerá de cómo se afirme el mercado. Vamos hacer esfuerzos conjuntos. ¿Cuánta mano de obra van a emplear una vez que se ponga en marcha la fábrica? Nosotros calculamos tener en promedio 500 personas de manera estable, y cuando tengamos que sembrar o hacer alguna actividad adicional, hablaríamos de cien o doscientas personas más. Pero el ingenio operará solo con 150 personas. ¿El tema de la electricidad está asegurado para sus operaciones? Por supuesto, vamos a tener nuestros propios turbogeneradores producto del bagazo que se va a producir, vamos a generar la energía necesaria para el ingenio, los pozos y seguramente el excedente lo venderemos a las empresas. ¿Qué tipo de dificultades han encontrado en cuanto a la mano de obra? No hay mucha mano de obra calificada en la zona, considerando que las operaciones van a ser totalmente mecanizadas, la fábrica es un ingenio moderno, automatizado, con tecnología de punta, diferente a los ingenios tradicionales. Nos estamos moviendo entre Chiclayo, Piura y Tumbes, tanto a nivel de obreros y de técnicos. La parte agronómica es riego tecnificado con pivots centrales, y el servicio de corte de caña y transporte será mecanizado. Por tanto a los operadores de maquinaria hay que capacitarlos, estamos trayendo profesionales para formarlos, ya que en Perú no hay. ¿Cuán beneficioso para ustedes es el riego con pivots? Es mucho más eficiente hacerlo así que el sistema tradicional, con el pivot la utilización del agua es mucho más óptima en cuanto a costo y resultados. Esa es la razón por la que cuando se hace agricultura en el desierto se trabaja con equipos de riego tecnificado: goteo o pivots. Esto ya lo habíamos hecho en San Jacinto con buenos resultados. El riego tecnificado se ha creado justamente para usar el agua en forma más eficiente. Incluso la corporación está trabajando un proyecto para incorporar pivots en el valle Chicama (Casa Grande), considerando que hoy en día es deficitario de agua. Transportar agua a tajo abierto por acequia tiene una eficiencia de solo el 40%, con el pivot llega al 98%. Toda el agua que nos venden (pagan entre 6 y 7 centavos de dólar por metro cúbico) tengo que utilizarlo de manera más eficiente, porque es uno de mis principales costos. ¿La apuesta por Olmos para ustedes es satisfactoria hasta el momento?, ¿fue la mejor decisión que tomaron? Claro que sí, a pesar que el proyecto todavía no nos atiende como debiera ser. Tenemos algunas deficiencias que estamos trabajando de la mano de la Asociación de Propietarios que hemos creado (ProOlmos) y con H2Olmos, para resolver algunos problemas como el de la carretera que une con la Panamericana, que tenemos que trabajarlo conjuntamente con ellos, y los gobiernos Regional y Nacional. Hay empresarios que están sembrando productos finos de exportación como paltos, arándanos, cebolla, y sacar eso hasta la Panamericana es un problema porque la vía no es la mejor. Estiman que por lo menos hay un 20% de merma de la fruta que cosechan. Esto nos preocupa mucho, al igual que la seguridad (han sido objeto de robos). Pero resolviendo esos temas creo que Olmos sí es un polo de desarrollo para Lambayeque.