El Ministerio Público entregó 37 cadáveres a los familiares de las víctimas de la masacre de Santo Tomas de Pata, provincia de Angaraes, Huancavelica, crimen atribuido a Sendero Luminoso en 1991. Los restos fueron encontrados en fosas clandestinas. El Ministerio Público entregó 37 cadáveres a los familiares de las víctimas de la masacre de Santo Tomas de Pata, provincia de Angaraes, Huancavelica, crimen atribuido a Sendero Luminoso en 1991. La entrega de los restos óseos, encontrados en la víspera en fosas clandestinas, se realizó en la Plaza de Armas de Ayacucho, en una ceremonia pública, luego de los análisis realizados por los peritos. Inmediatamente, los restos fúnebres fueron trasladados en caravana al centro de la ciudad, para que sean velados por la noche. Hoy, los cadáveres serán llevados a su ciudad natal, Santo Tomas de Pata, con el fin de que los familiares y las autoridades locales les brinden una cristiana sepultura. Según testigos, la tarde del dos de noviembre de 1991, por lo menos 300 senderistas atacaron a la población por cuatro frentes y asesinaron a 37 personas entre ellos niños, mujeres y ancianos. La acción terrorista fue –se informó– como respuesta a la intención de la población de organizarse en Comités de Autodefensa (CAD), a fin de contrarrestar las frecuentes incursiones de Sendero Luminoso en la zona. LA CLAVE Ubicación. Los restos de los campesinos fueron encontrados en tres fosas comunes, ubicadas en Santo Tomás de Pata, provincia de Angaraes. También se hallaron ropas y objetos.