Cinco investigados más podrían dejar la prisión preventiva

De los investigados del caso Lava Jato que cumplen prisión preventiva, dos saldrán en libertad (Jorge Cuba y Edwin Luyo) para afrontar el juicio oral, y otros cinco podrían salir dentro de poco, debido a que está por cumplirse el plazo máximo de pena privativa que se les ha sido impuesto, y no tienen sentencia ni acusación formal.

El más próximo es el exgobernador del Cusco Tito Acurio, quien podría salir el viernes 15 de noviembre, debido a que la Primera Sala Penal Nacional de Apelaciones rechazó que se le amplíe la prisión preventiva que cumple desde el 15 de mayo del 2017 por recibir sobornos de Odebrecht.

La exautoridad regional del Cusco cumple prisión preventiva desde el 27 de mayo del 2017, inicialmente por un plazo de 18 meses por delitos de tráfico de influencias y lavado de activos, bajo los alcances de la Ley Contra el Crimen Organizado.

Al cumplirse ese plazo, el 13 de noviembre del 2018, la prisión preventiva se prolongó por otros 10 meses, hasta el 15 de setiembre de este año.

A mediados de agosto, la Fiscalía volvió a pedir que se mantenga la prisión preventiva para Tito por 8 meses más para llegar a los 26 meses, pero solo le dieron dos meses más, por lo que la próxima semana podrá recuperar su libertad.

Otro que no tiene acusación ni sentencia es el exfuncionario aprista Miguel Navarro Portugal, quien es investigado por los sobornos que entregó la empresa Odebrecht por la Línea 1 del Metro de Lima.

Navarro fue enviado a prisión el 26 de enero del 2017 por 18 meses, pero le ampliaron el encierro hasta los 36 meses. La restricción en su contra culmina el 26 de enero del 2020, es decir, solo le faltan dos meses y medio para salir en libertad, aunque está en el mismo caso de Jorge Cuba y Edwin Luyo, por lo que podría salir antes si logra una resolución a su favor.

Al exjefe de Ositrán en el gobierno aprista Juan Carlos Zevallos le dieron 36 meses de prisión preventiva por presuntos delitos de tráfico de influencias y lavado de activos, debido a que Odebrecht le habría pagado sobornos por 750 mil dólares, que le fueron depositados en dos cuentas de Andorra entre 2008 y 2013, para acelerar la emisión de certificados en los tramos 2 y 3 de la Interoceánica a favor de la constructora brasileña.

Zevallos ingresó a prisión el 23 de marzo 2017 y le corresponde salir el 23 marzo 2020 si es que no tiene sentencia ni acusación de la fiscalía. Es decir, podría recuperar su libertad en cuatro meses y medio.

Un caso similar es el de Víctor Muñoz Cuba, primo del exviceministro aprista Jorge Cuba, cuya prisión preventiva de 30 meses vence el 29 de marzo del 2020, por lo que le faltan cuatro meses y medio para salir en libertad. Es investigado por presunto lavado de activos, al estar implicado en el recibo de sobornos de Odebrecht para adjudicar la obra de la Línea 1 del Metro de Lima.

El caso más emblemático, sin duda, es el de Keiko Fujimori, quien tiene programada su salida para el 30 de abril del 2020, pero podría obtener su libertad mucho antes si el TC se pronuncia a favor del hábeas corpus planteado por su hermana Sachi Fujimori.

Investigada por lavado de activos al recibir aportes de Odebrecht, ingresó a prisión el 31 de octubre del 2018 con una orden de 36 meses de prisión preventiva en su contra, pero la medida restrictiva le fue disminuida a 18 meses, por lo que le faltan cinco meses para salir en libertad.

El dato

- Plazo. La jurista Romy Chang explicó que el plazo de prisión preventiva es para emitir una sentencia definitiva y si el fiscal demora en acusar, el Poder Judicial no va a poder condenar en el plazo de la detención.