Un evento catastrófico estaría muy cerca de afectar al mundo. Barack Obama y diferentes mandatarios del mundo han pedido a sus ciudadanos que se preparen para recibirlo y soportarlo., El Sol podría ser el causante de un gran evento catastrófico en el corto o mediano plazo, el astrofísico solar Héctor Socas explica que nuestra dependencia de la tecnología podría ser el punto más dañado con un evento solar. PUEDES VER: National Geographic estrena "MARS": la ciencia y la televisión se juntan en una misión a Marte "Se nos acumulan noticias de carácter preocupante sobre el Sol y las tormentas solares, esas violentas explosiones que tienen lugar sobre su superficie que propulsan al espacio enormes proyectiles de plasma magnetizado. Hemos leído que Obama ordena al país prepararse para una catástrofe, que incluso en Alemania el gobierno recomienda a sus ciudadanos hacer acopio de agua y comida; y ahora nos llega una nueva noticia sobre una explosión solar que ha provocado un baño de rayos cósmicos en la Tierra. Por otra parte, en nuestro Facebook y Whatsapp resurge el famoso bulo de que la NASA predice 15 días de oscuridad, una mentira viral que cada cierto tiempo resucita obstinadamente cual zombie que no termina de morir. Desde el apocalipsis de las profecías Mayas sobre el fin del mundo en 2012 no habíamos visto un repunte tan frenético de noticias angustiosas relacionadas con el Sol. Los científicos que trabajamos en este tema recibimos continuamente consultas de ciudadanos preocupados porque, como dice el refranero, «cuando el río suena es que agua lleva». Los más suspicaces llegan a la conclusión que las autoridades saben algo que nos ocultan, algo inminente se avecina. Después de todo, Obama ha dado orden de prepararse. Lo cierto es que sí se avecina un evento inminente y potencialmente peligroso para el planeta. Se trata de las elecciones a la presidencia de los Estados Unidos. La Administración Obama lleva mucho tiempo desarrollando una estrategia para responder a una posible situación adversa provocada por un gran evento solar. Esta estrategia surge de la oficina presupuestaria y consiste en una serie de medidas, líneas de financiación y hojas de ruta para las diferentes agencias nacionales. Se calcula que una gran tormenta solar comparable al «evento Carrington», que golpeó la Tierra en 1859, produciría daños en nuestro tejido tecnológico por valor de varios billones de dólares. Las tormentas solares no son catástrofes apocalípiticas, en el sentido de sembrar muerte y destrucción por doquier. Tengamos en cuenta que han venido ocurrido toda la vida, desde antes de que el hombre pisara la Tierra. La diferencia con situaciones anteriores es que nuestra tecnología sí es vulnerable a estos fenómenos de naturaleza electromagnética y cada vez dependemos más de ella. Es decir, el evento para el que se prepara la Administración Obama no es el de una gran tragedia humana, sino una auténtica crisis financiera a escala mundial comparable a originada por las hipotecas basura en 2008. No podemos saber con antelación cuándo ocurrirá el próximo evento tipo Carrington pero los estudios científicos sugieren que la probabilidad es aproximadamente de un 10% cada década. ¿Por qué, entonces, ordena Obama a su país que se prepare justo ahora? ¿Qué es lo que han visto? En realidad, nada. Valentín Martínez, director del «National Solar Observatory de EEUU», lo aclara en declaraciones para« señalyruido.com». Se trata de una mala interpretación debida a una traducción excesivamente literal. Lo que hace Obama es lo que hacen habitualmente los presidentes estadounidenses al final de su mandato: apresurarse a plasmar en leyes aquellas iniciativas en las que han estado trabajando durante la legislatura. De esta forma, se transfiere al siguiente presidente la obligación de acatar (o derogar) estas resoluciones. A esta acción, en jerga legal estadounidense se la llama «executive order», que muchos traducen literalmente a nuestro idioma como «dictar una orden ejecutiva» pero quizás sería más fiel traducir por «aprobar una ley». La diferencia es muy grande porque suena mucho más preocupante e inminente decir «Obama ordena prepararse» que «Obama aprueba una ley para prepararse». Por tanto, no hay que leer en estas noticias que las autoridades estadounidenses tengan noticia de alguna catástrofe inminente, sino la muy acertada iniciativa de un país que quiere estar preparado para algo que ocurrirá tarde o temprano. Seguramente no mañana ni pasado, pero casi ciertamente en los próximos 50 o 100 años. Quizás lo sorprendente es que no estemos todos los demás haciendo lo propio. Lee el texto completo: ¿Le pasa algo raro al Sol últimamente?