Doly Príncipe | Cantante de música peruana y latinoamericana,Doly Príncipe celebra 28 años en la música el sábado 23 en el Club Apurímac. La acompañarán Sila Illanes, Nancy Manchego, Consuelo Jery, el Dúo Arguedas, entre otros destacados artistas. ¿Cómo empiezas con la música? Nací en Huacaybamba, Huánuco, y escucho música ancashina del conjunto Atusparia. Mi padre lleva LPs de Cuerdas del lago, de Puno, de Teodoro Valcárcel. El disco del trío Yanahuara en los yaravíes. Me encantó tanto. A los 7 años llego a Lima y a los 13 escucho por primera vez una zampoña en vivo y los grupos de música latinoamericana. PUEDES VER La Tarumba presenta talleres de invierno en La Contra ¿Y cómo consideras a tu música? Una música sentimental con diferentes matices en su formación. Mi corazón está repartido en Cusco, Ayacucho, Cora Cora, muy importante para mí, Apurímac, y Áncash, que es mi segunda tierra. Todo ello amalgama mi música peruana y de mi patria grande, Latinoamérica. ¿Cuándo empieza tu carrera? En 1991 conozco a Mónica Cuadra y formamos el Dúo Wayra. Fue un trabajo muy fuerte de 12 a 13 años. El resto de tiempo, extrañándola mucho, pero sí disfrutamos cuando nos juntamos para cantar. Sola nunca será igual que cantar de a dos, y si es en grupo, mucho mejor. Y de allí, sin pensar llegan 28 años de labor musical. También formé parte de la agrupación Piedra y camino, que fundó Ricardo Eyzaguirre, donde se hacía un trabajo coral. PUEDES VER Aracely Villafuerte: “¿Actuar? Si les gusta, háganlo... sigan con sus sueños” En género Yaraví te gusta tanto. Logré escuchar los harawis de niña, pero luego al escuchar el yaraví, se queda en el subconciente. Y en la edad de la alegría me parecía algo triste. Cuando papá se va arriba, había grabado el yaraví El imposible con Wayra, con mucha aceptación. Mi papá me decía que cante más yaravíes. De niña escuché La flor del café, una tía la cantaba y me movió. Hay un hilo conductor en el yaraví, en diferentes zonas del país. Tiene que ver con la tristeza milenaria del campo. ¿Lo sientes así? Cuando era chica me parecía triste, pero llegué a entenderlo. El Yaraví me da fortaleza, es un estado reflexivo sobre la tristeza, donde no muere la poesía. El harawi, que es de donde proviene el yaraví, le da nacimiento a la vidala argentina y a la muliza peruana. Hay también el kusi harawi, el harawi de la alegría, entre otros tipos de harawi. PUEDES VER Roxie: “Hay personas que les gusta llevarse un pedazo de ti a su casa” Haces también otro tipo de música. A los 13 años escucho a Savia Andina y me transporta a las culturas originarias. Era mágico escuchar todos esos instrumentos, por ello empiezo a ver a Latinoamérica como mi patria grande. ¿Qué presentas este sábado 23? Cumplo 28 años de vida artística y me acompañarán mis maestros y amigos. Estarán Víctor Angulo, mi maestro en yaravíes, el Dúo Arguedas, El trío Ayacucho, La estudiantina andina, El grupo femenino Andina, Sila Illanes, Nancy Manchego, Azucena Cantarina, Consuelo Jery, Wilberth Aráoz, Yesenia Alanya, también el Dúo Wayra. Será en el Club Apurímac, desde las 8 de la noche. Los espero.