Pedro Castillo espera la proclamación para iniciar la transferencia

A 17 días del cambio de mando todavía no hay proclamación por parte del Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Es consecuencia directa de la estrategia de Fuerza Popular de taponear al sistema y alargar todo lo que pueda el proceso. Sin embargo, de no mediar ninguna sorpresa mayúscula, se espera que esta semana Pedro Castillo sea anunciado como el presidente de la República para el periodo 2021-2026.

Cuando eso ocurra, tendrá que correr contra el tiempo.

“Todavía todo anda algo confuso”. La frase le pertenece a una persona enterada de cómo se viven estos días en el comando de Perú Libre. Castillo llegó a estar preocupado por el desenlace de la ofensiva legal fujimorista. Con el panorama algo más claro, se ha podido concentrar más en lo que viene a partir de ahora.

No hay definiciones. Sí algunas ideas preliminares de cómo sería la transición, que a estas alturas se encuentra muy atrasada (para efectos comparativos de lo que pasó en elecciones anteriores, revisar la tabla que acompaña este informe).

Una transferencia con poco tiempo genera problemas. El economista Kurt Burneo (que en algún momento estuvo voceado como parte del equipo de Castillo) lo explica bien: “A más demora del término del proceso electoral, menos tiempo habrá para una adecuada transferencia a la nueva administración y para conocer el estado de la situación sectorial en temas administrativos actuales y pendientes”.

Cualquier gobierno que entra necesita, por cierto, de la información más precisa posible para saber de dónde parte.

Una opción para dirigir la transferencia es Dina Boluarte, que postuló como vicepresidenta. Se nombrará a un coordinador por cada ministerio. Se está pensando en dónde instalar a todos durante los días que demore esta transferencia. El Centro de Convenciones, en el distrito de San Borja, aparece como posibilidad.

Mientras tanto, se viene trabajando por sectores.

En salud, por ejemplo, hay unas 200 personas divididas en siete grupos que ven diferentes temas: propuestas para el primer nivel de atención, presupuesto, problemática hospitalaria, descentralización, vacunación, entre otros.

La conducción de este equipo corre por cuenta del excongresista y médico Hernando Cevallos.

Lo que se está elaborando ahora es un informe con las medidas inmediatas con las que se debería empezar y un plan a mediano y largo plazo. Se ha recolectado información de personal del Minsa. Sin embargo, falta un mayor nivel de detalle que solo un proceso de transferencia puede ofrecer.

Reuniones

Otro pendiente tiene que ver con el gabinete ministerial. Cualquier anuncio al respecto también se encuentra detenido, al menos hasta que el JNE culmine su trabajo y proclame al ganador de los comicios.

Desde luego, hay nombres que se sueltan y escuchan como posibles ministros. El propio Cevallos en el Minsa. También Pedro Francke, en el Ministerio de Economía y Finanzas. De hecho, este último ha estado asistiendo a reuniones con empresarios nacionales y extranjeros. Un reciente artículo de Reuters daba casi por sentado que sería quien asuma la cartera.

Asimismo, este diario publicó la semana pasada que Manuel Rodríguez Cuadros podría recalar en la Cancillería. Las constantes reuniones de Verónika Mendoza con Castillo –ayer, sábado, tuvo otra– han llevado a los medios a sugerir que podría ser premier. La líder de Juntos por el Perú ha negado haber conversado algo al respecto.

Hay nombres adicionales que se han vinculado con Castillo.

Uno es el excandidato presidencial de Victoria Nacional George Forsyth, quien se ha juntado con su exrival electoral hasta en tres oportunidades. A la salida de esas conversaciones, ha dicho sobre Castillo que “no es comunista” ni tiene “interés en expropiar”. En el entorno de Perú Libre se menciona al padre del exalcalde de La Victoria, el diplomático Harold Forsyth, como un posible refuerzo en el equipo.

Otro es el exministro Jorge Nieto Montesinos (y que, precisamente, fue cabeza de lista al Congreso por Victoria Nacional). Al respecto, es cierto que desde Perú Libre lo han buscado a través de intermediarios. No obstante, Nieto prefiere acercarse a conversar una vez que el JNE cumpla con la demorada proclamación.

El Congreso

Castillo ha tenido también intercambios con líderes de partidos que tendrán representación en el nuevo Congreso.

Fuentes próximas al líder de Alianza para el Progreso, César Acuña, confirmaron a La República que ha habido comunicaciones entre este y Castillo.

Los intermediarios han sido congresistas electos y otros en ejercicio (como Luis Valdez). Tampoco hay que olvidar que Juan Sheput –hoy próximo a Acuña– compartió militancia con Castillo en el desaparecido Perú Posible.

Cabe señalar que ha habido algunas controversias al interior de APP por el tema Castillo.

El economista Daniel Córdova, uno de los más entusiastas promotores de la teoría del “fraude”, fue el jefe de plan de gobierno del partido. Al final, le pidieron que pida una licencia para no comprometer a la organización en su trabajo político.

De acuerdo con la versión que este diario recogió en APP, Castillo le pidió a Acuña que lo reconozca como ganador de las elecciones. Este último respondió que hay que esperar la proclamación del JNE.

Aparte, el semanario Hildebrandt en sus Trece indicó, en un artículo aparecido el viernes, que Castillo le solicitó a Acuña que lo ayuden a gobernar y hasta habrían conversado acerca de conformar una mesa directiva multipartidaria.

La República consultó al respecto con sectores cercanos al profesor y respondieron que, en efecto, una posibilidad para una mesa que agrupe a distintas organizaciones podría incluir a APP y a Acción Popular, sobre todo al sector más cercano al presidente de la organización, Mesías Guevara.

Guevara, como se sabe, es el gobernador regional de Cajamarca, la región de la que es oriundo Castillo. Ambos se conocen hace ya un buen tiempo. El acciopopulista tiene un muy buen concepto de su paisano.

Perú Libre sabe que necesita conciliar. En el peor escenario, su bancada de 37 no le permitiría por sí sola evitar una vacancia presidencial.

En ese sentido, Betssy Chávez, congresista electa por el partido del lápiz, ha dicho que las “organizaciones de centro” están esperando la proclamación oficial para poder “llegar a un acuerdo entre bancadas”.

Esto da a entender que se estaría, en efecto, buscando arribar a un acuerdo para tratar que el gobierno de Castillo no esté expuesto a las arremetidas de la oposición liderada por el fujimorismo y sus cercanos, como Renovación Popular, de Rafael López Aliaga.

Para la electa congresista Chávez, el consenso político en el Parlamento resulta una pieza clave para la gobernabilidad y la estabilidad.

No se puede empezar con la transferencia

Han pasado 35 días de la segunda vuelta entre Pedro Castillo y Keiko Fujimori y no hay problamación. El 2011 Ollanta Humala recibió las credenciales oficiales como electo presidente el 23 de junio, en la sede del Museo de Arqueología, Antropología e Historia del Perú. Fue en una ceremonia a la que asistieron autoridades del Estado, parlamentarios electos y otros invitados. Un día antes, incluso, el 22, ya había empezado el proceso de transferencia.

¿Y qué pasó en la elección de 2016 entre Pedro Pablo Kucsynski y Fujimori? El triunfador de la contienda electoral fue Kucsynski, quien recibió sus credenciales y fue proclamado como presidente el 28 de junio. Las comisiones de transferencia empezaron a trabajar desde el primero de julio. Muy diferente a lo que se ve ahora.

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