Domingo

Mi tarea en mi propia lengua

Hacer la tarea, en época de cuarentena, es posible para los casi 170 mil chicos de comunidades andinas y amazónicas que, desde el lunes pasado, reciben el programa Aprendo en casa en su lengua originaria, sea quechua, aymara, asháninka, awajún, shipibo, shawi o yanesha, mediante 36 emisoras de radio de todo el país.

Las clases a distancia que impone la cuarentena son, para ellos, totalmente diferentes a las que reciben los niños en las ciudades. Para comenzar, sus improvisadas mesas de trabajo pueden ser un tablón de madera que, fuera del horario de clases, sirve de mesa familiar, o el pasto verde al aire libre donde, alrededor de libros y cuadernos, chillan los pájaros o pastan las ovejas.

Allí no existe el encierro, porque sus hogares apenas si tienen paredes pero, también, porque el concepto mismo de quedarse adentro de una casa es difícil de entender, lo que explica por qué los mayores han optado, más bien, por cerrar los pueblos enteros al acceso de foráneos que podrían ser portadores del virus del que todos hablan.

Tampoco las lecciones se parecen a las demás: no las ven por televisión o internet, sino las escuchan por radio, casi siempre una pequeña, a pilas, porque en los lugares donde viven la luz eléctrica es una leyenda tan fantástica como los personajes que pueblan los cuentos que les cuentan sus padres por las noches y que forman parte de su singular visión del mundo.

Desde el lunes pasado, una gran parte de chicos en edad escolar -un millón trescientos mil para ser exactos- reciben sus clases a distancia, a través del televisor o por internet, pero hay ciento setenta mil en diferentes puntos del país que no las escucharán en español, sino en sus lenguas originarias. En total, nueve de las muchas que se hablan en diferentes comunidades nativas de la sierra y de la selva: quechua collao, quechua chanca, quechua central, aymara, asháninka, awajún, shipibo, shawi y yanesha.

La lengua originaria mayoritaria, como es de suponer, es el quechua en sus tres variantes (collao, chanka, central), que llega a 94,710 niños, que constituyen más del 55% del total de estudiantes de lenguas originarias que estudiarán mediante el programa Aprendo en casa. Luego viene el awajún (30,167), seguido por el asháninka (16419), el shawi (10581), el shipibo (9,549), el aymara (7,782) y el yanesha (389).

¿Por qué nueve si en el país hay cuarenta y siete lenguas originarias oficialmente reconocidas y que cuentan con un alfabeto normalizado? Nora Delgado, directora general de Educación Intercultural Bilingüe (EIB) del Ministerio de Educación, explica: “El criterio para elegir esas nueve lenguas fue, primero, que los beneficiarios sean niños y niñas de comunidades donde una mayor parte de la población las hable. Segundo, que esas lenguas sigan siendo vitales. Es decir, que se hablen por todos: niños, adolescentes, adultos y ancianos”.

Pero, si a nivel nacional se ha priorizado solo nueve lenguas, eso no quita que a nivel regional sí se estén dando procesos de desarrollo de sesiones en otras lenguas originarias. Por ejemplo, en Cajamarca, la dirección regional está por trabajar sesiones de aprendizaje en quechua norteño; en Lambayeque se va a trabajar, con la Ugel de Cañaris, con el quechua Incahuasi-cañaris, y así en otras regiones del país.

El Minedu tiene un registro de instituciones educativas EIB que ha dividido según escenarios lingüísticos. El primer escenario son las comunidades en las que la lengua materna es originaria y predominante. Allí, los niños van aprendiendo el castellano como segunda lengua. Esas son las llamadas Escuelas de Fortalecimiento Cultural y Lingüístico.

En otro escenario están los lugares donde, siendo los niños indígenas, su lengua materna ya es el castellano y quienes hablan esa lengua originaria son las personas adultas o ancianas. Este grupo de escuelas se denominan Instituciones EIB de Revitalización, porque allí se requiere rescatar la lengua y la cultura original para que no se pierdan.

La educación a distancia que recibirán los niños durante la cuarentena se dirige básicamente a las primeras, es decir, a las instituciones EIB de comunidades donde la lengua originaria es indispensable. Y, eso, solamente en inicial y primaria.

Al respecto, Nora Delgado aclara: "En el caso de secundaria, los chicos ya están en un nivel próximo a salir de la básica regular, y hemos optado por llegar a ellos con sesiones de aprendizaje en castellano, pero que contemplan la cosmovisión, las potencialidades o necesidades de sus culturas".

Proceso complicado

El principal desafío de esta etapa de emergencia ha sido montar una estrategia en solo dos semanas para poder transmitir las sesiones de aprendizaje en las nueve lenguas originarias. "Y ha sido el principal, porque no solo se tienen que grabar las voces, sino que todo eso es producto de un trabajo muy intenso dentro de la Dirección de Educación Intercultural Bilingüe para organizar al equipo pedagógico, al de comunicadores y al de lingüistas, y de desarrollar las sesiones de aprendizaje en función a la currícula nacional, pero teniendo en cuenta el problema del coronavirus y, también, toda la cosmovisión y las percepciones de los pueblos en relación a esta pandemia", señala Nora Delgado, quien lleva trabajando con lenguas originarias casi dos décadas.

¿Y cómo ha sido la recepción de Aprendo en casa en las comunidades a las que se ha dirigido? "Increíble. Desde el lunes, hemos recibido reportes de todos los lugares donde ha llegado, desde Yurúa (frontera con Brasil), hasta niños asháninkas escuchando los programas en su lengua. Ha sido todo muy intenso", señala Nora, quien nació en Pucallpa y, aunque su lengua materna es el español, se comunica bastante bien en idioma shipibo.

Al respecto, reconoce: "Manejar un idioma originario te ayuda a comprender la realidad, las demandas de cada comunidad y la necesidad de una educación propia que debe articularse con la demanda de un país unitario y al mismo tiempo diverso".

Y tiene razón. Desde el lunes pasado, una enorme masa de niños hablantes de lenguas originarias se ha sentido por fin integrada al resto del país, como miembros de poblaciones que tienen una identidad propia pero que, al fin al cabo, también son parte indivisible e indispensable de esa otra gran comunidad llamada Perú.

• Estas son las radios estatales y privadas que transmiten ‘Aprendo en casa’ en lenguas originarias:

Radio Chalhuanca, Radio Titanka, Radio Alegría, Radio Taki, Radio Impacto, Radio Selva, Radio Huanta, Emisora Municipal Cangallo, Radio Marginal, Radio Santa Mónica, Radio Quillabamba, Radio La Decana, Radio Melodía, Ondas del Huallaga, Radio Altura, Radio Sembrador, Radio Chévere/Radio Urbana, Radio Studio 97, Radio Sistema, Radio Carmelita, Radio Trueno, Radio Pachamama, Radio Tacna, Radio Latina (Radio Americana), Radio Feroz, Radio del Progreso, Stéreo 100, Radio Selva, Radio Sensación, Radio Amazónica, Radio Studio Selva, Radio Kampagkis, Radio Libertad, Radio Rioja, Radio Café y Radio Perené, Radio Fuego, Radio Fharys, Radio RTV Total, Radio Libertad y Radio Milenium.