Descubren que antigua momia egipcia con forma de niño no es humana
Científicos en Israel creyeron que iban a encontrar corazones humanos. No hallaron los órganos y ni siquiera lo que vieron pertenecía a una persona.
En Israel, un equipo de científicos reveló el interior de dos antiguas momias egipcias y descubrió que ninguna de ellas contenía restos humanos como pensaban. Los investigadores creyeron que iban a encontrar corazones de personas, pero todo lo que hallaron fue desconcertante.
Según informa Live Science, las dos momias, ambas enterradas en sarcófagos, han estado alojadas en el Museo de Haifa durante 50 años. Tienen más de 2.000 años de antigüedad. Una de ellas presenta la forma de la deidad con cabeza de halcón, Horus, mientras que la otra toma la morfología de un niño, diseñada para parecerse a Osiris.
Precisamente, esta última, con forma humana y que mide aproximadamente 45 centímetros, contenía barro y granos, por lo que los investigadores creen que se trata de una ‘momia de maíz'.
“Durante los festivales de Osiris que se celebraban, [los antiguos egipcios] producían estos”, explicó Ron Hillel, registrador y jefe de gestión de colecciones de Haifa Museums. “Sería una mezcla de arcilla o arena con estos granos, y luego lo sumergirían en agua y los granos germinarían”. En efecto, este acto vincularía a Osiris con la muerte, la vida y la fertilidad de la Tierra.
La otra momia, en cambio, contenía restos de un pájaro. Se cree que es un halcón, tal como su diseño del exterior. No obstante, le falta una parte del cuerpo y varios órganos.
“Le falta la pierna izquierda, nadie sabe por qué”, comentó la Dra. Marcia Javitt, presidenta de radiología en el Hospital Rambam en Haifa y profesora adjunta de radiología en la Universidad George Washington (Estados Unidos), quien ayudó a escanear las momias.
PUEDES VER: Gérmenes espaciales son un riesgo inmunológico para los humanos, sugieren investigadores
Esta momia que representa al dios Horus mide 25 centímetros. Según la mitología egipcia, Horus era el hijo con cabeza de halcón de Osiris e Isis; una deidad asociada con el cielo y los faraones.