Puno. Los ciudadanos afectados por la contaminación de la cuenca de Llallimayo acordaron que el 5 de abril iniciaran un paro indefinido para exigir una reunión presencial con los ministros a fin de remediar las consecuencias provocadas por la actividad minera.
Este acuerdo se adoptó en una reunión donde participaron los dirigentes de las zonas afectadas y el alcalde de la Municipalidad Provincial de Melgar, así como los alcaldes distritales de Cupi, Llalli, y Umachiri.
En enero del presente año se debió llevar a cabo la reunión con ministros de diversas carteras involucradas en este caso; sin embargo, suspendieron la cita. “No quieren atender nuestro reclamo, por ello estamos emprendiendo este paro indefinido”, dijo el dirigente Edwin Díaz.
Durante el 2020 se desarrollaron protestas similares. En ese entonces, participaron pobladores de los distritos de Cupi, Llalli, Umachiri, Macarí, Santa Rosa, Nuñoa y Orurillo. Ellos exigían que la empresa Aruntani SAC retire todas sus operaciones mineras de la cabecera de cuenca.
La afectación se debe al vertimiento por años de aguas ácidas y turbias por parte de dicha minera que explotaba oro en el distrito de Ocuviri, provincia de Lampa. La empresa está en proceso de cierre; no obstante, la contaminación continúa.