El director del hospital Hipólito Unanue, Eddy Vicente, pidió disculpas ayer a la familia Mamani Valdivia por el error en la entrega de cadáveres del área COVID-19 ocurrido el jueves. Afirmó que su institución se sometería a las investigaciones administrativas o fiscales que correspondan.
El viernes por la tarde, el ciudadano Roberto Rodríguez, sobrino del fallecidoToribio Mamani Valdivia (72), denunció que el cuerpo de su tío no se encontraba en la cámara de refrigeración portátil del área COVID. El personal del hospital reconoció que el cadáver había sido entregado a otra familia el jueves por la noche.
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Vicente sostuvo que el Unanue maneja un protocolo para la disposición de los cadáveres. Sostuvo que todos los cuerpos tienen un letrero de identificación y presume que este habría sido dañado por el uso desinfectantes sobre la bolsa que protege el cuerpo.
El cuerpo de Mamani fue enterrado en el Cementario General por una familia que no era la suya. Rodríguez, su sobrino, explicó que el hospital no colocó la etiqueta de identificación en el cuerpo y la familia que se lo llevó se equivocó al reconocer una cicatriz similar que ambos cadáveres tenían.
Los Mamani Valdivia también compraron un nicho en Cementerio General y el caso se solucionó ayer con el cambio de placas en las tumbas. No fue necesaria la inhumación y las dos familias pudieron despedirse de sus seres queridos.