Las dietas pueden ser muy beneficiosas para el organismo, pero si carecen de nutrientes esenciales provocan daños irreversibles. Como le ocurrió a una bebé en Australia, cuyos padres la sometieron a una estricta alimentación vegana que le causó parálisis cerebral.
Un tribunal del país condenó a la pareja a 12 meses de trabajo comunitario tras declararla culpable de negligencia contra su hija. Antes de dar su veredicto, el juez analizó los reportes de 2018 en los que se evidencia que la pequeña fue hospitalizada con un grave nivel de desnutrición.
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Los médicos descubrieron que tenía hematomas en el cuerpo, erupciones cutáneas, decoloración de la piel, estaba letárgica y tenía sangre de color oscuro en el pañal.
Desde que la menor tenía cuatro meses de edad, los padres veganos dejaron de alimentarla con leche materna tras ignorar las recomendaciones del pediatra, y en su lugar le daban de comer: leche de coco, jugo de frutas, batidos, alimentos de origen vegetal, etc.
La bebé nació sana, pero en noviembre de 2017 comenzó a perder peso. Sus progenitores se negaron a llevarla al médico e intentaron corregir la desnutrición con alternativas “naturales”, hasta que se descompensó gravemente y pasó casi un mes en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
El magistrado aseguró el lunes 28 de setiembre que la niña de tres años, enfrentaba luchas diarias en su desarrollo cognitivo, funcionamiento físico y comunicación, y descubrió que su desarrollo normal se vio alterado por las acciones de sus padres.
Sin embargo, la justicia de Australia no contempló una condena de cárcel a los padres, ya que ahora le proporcionan una dieta sana y nutritiva, según el medio local The Age.