El exagregado cultural en España y escritor Eduardo González Viaña estuvo en la Feria Internacional de La Libertad y habló de su nuevo libro, así como el racismo apoderado en un país de no blancos.
¿Hay un país polarizado, cuál es su opinión?
Una polarización, que ha existido desde la colonización del país, ha sido divido y no solo económicamente, es una guerra étnica, entre blancos que no existen y los otros, es un racismo patético, se adjudican lo que no tienen, tratan de inventarse que son blancos y por ello cholean, provincianean o terruquean.
¿Esta polarización, es de ahora o se arrastra en años, hasta se habla hoy de un 50-50 %?
Hay una conmoción política en medio de ello surge más esto. No diría que porcentaje se da, creo que todos o esos unos son más agresivos. Pero eso que se expresa ya ha ocurrido en la vida republicana del país, como en la década del 30 en Europa se quería imponer una raza aria y en Perú surgía el partido Unión Republicana, era profascista, pro de la raza superior, pero los oponentes eran morenos, el líder era Sánchez Cerro.
¿Cómo nos ven afuera tras toda esta conmoción en Perú?
Lamento sentir que en todo el mundo hay una preocupación muy seria, con respecto a los derechos humanos en Perú. Una preocupación que se extiende desde toda Europa a diversos países de América Latina, incluso ahora en los Estados Unidos.
¿Volvió a una feria del libro?
Si, gracias a la Universidad César Vallejo, estamos en una nueva feria. Emociona ver a mucha gente que está leyendo, preocupados por adquirir libros, como íbamos a pensar que eso ocurriría, hace tres años, cuando creíamos que todo se había acabado con la pandemia. Hace tres años estaba en mi lecho de enfermo, porque me dio Covid-19 y pensaba que me derribaba y tome la decisión de escribir un libro más.
¿Qué busca con la novela Kachkaniraqmi, Arguedas?
Esta obra es un intento de acercamiento al Perú auténtico; al mundo andino que ha sido desconocido y ha sido una postal solamente. En el caso de Kachkaniraqmi, Arguedas es diferente, porque se trata de personificar y hacer que ese mundo hable. José María Arguedas es un escritor andino que posee un lenguaje que no solamente es quechua, sino que contiene un espacio y un tiempo diferente.
¿Libros que nacen en medio de pandemia?
En la pandemia, cuando el mundo y Perú se estaba derribando por la pandemia, decido escribir historias que tengan que ver para levantarlo de nuevo, primero fue el “Largo Viaje de Castilla”, al año siguiente escribí sobre Garcilaso de la Vega con “El Último Garcilazo” y ahora esta novela para revalorar a Arguedas.
¿Que le falta por escribir?
Al autografiar mi libro a los lectores, es un compromiso de un libro más. Soy de Chepén y puede ser que el próximo titulo sea dedicado a mi pueblo, donde aprendí a leer