Todos los viajeros camino a Churín se detienen en Sayán para probar los alfajores creados hace más de un siglo por Mamita Santos, cuyas recetas caseras se pueden disfrutar en Dulces Lumbre.,Noemi Acuña / Revista Rumbos ¿Qué es lo mejor de Sayán? Sus alfajores y dulces, sin duda. Buenísimos. No soy dulcera, pero había que probar. Todo excelente, pero yo me quedo con las pecanas bañadas con manjar blanco. PUEDES VER: Sabor peruano: los burritos acriollados de Surco La creadora de estas delicias fue doña Santos Vargas o, más bien, las manos de doña Santos, quien fuera conocida como Mamita Santos. Ella, con mucho ingenio y buen gusto, elaboró a fines del siglo XIX los alfajores que le han dado fama a Sayán: finas tapas abrazando un inigualable manjar blanco. Dulce Sayán. Foto: Noemí Acuña Acostumbraba agasajar a sus vecinos y visitantes con sus preciados dulces, quienes, en retribución, le daban carnes, verduras y otras cosas. Se dio cuenta que podía ser una fuente de ingresos, lo cual le venía a pelo porque era viuda y criaba sola a todos sus hijos. Fue así que el 7 de enero de 1904 abrió su tienda. La llamó Lumbre en honor al apellido del esposo fallecido. Cuando la Mamita Santos sintió que las fuerzas la abandonaban encargó a su hija, Adriana Lumbre, la tarea de continuar con la tradición. Y así pasó de generación en generación. Hoy, esta industria casera se encuentra a cargo de los hermanos Fernando, Lucinda, Carlos y Aida Roldán Nava, bisnietos de Adriana. Su preparación es ciento por ciento artesanal y su presentación humilde a pesar de la fama. Sus dueños han rechazado muchas ofertas para vender Lumbre en Lima y otras ciudades. La tradición dulcera se transmite de generación a generación. Foto: Noemí Acuña “Mantenemos la receta de la Mamita Santos, todo casero. Si vendemos en cantidad, todo cambia. Además, si los consigues en cualquier lugar, ya la gente no pasaría por Sayán. No queremos ganar, sólo hacer lo que nos gusta. Gracias a Dios nunca nos ha faltado clientes”, señala Aida Roldán. En días particulares preparan 50 docenas de dulces, entre alfajores, pecanas bañadas en manjar blanco, y rellenos de melocotón y guindones. Los fines de semana y en fiestas la producción se triplica. Muchas veces falta…y es que de verdad que son irresistibles. Si pasa por Sayán, no deje de probrar los alfajores Lumbre. Foto: Noemí Acuña En Rumbo Dónde: Dulces Lumbre, Plaza de Armas de Sayán, Huaura, Lima. Horario: De 8:00 a.m. a 8:00 p.m.