Gigantescas operaciones para evitar el pago de impuestos.,Han pasado cinco días y no se tienen reacciones formales y oficiales respecto a los Paradise Papers, la segunda revelación masiva, luego de los Panama Papers, de las operaciones financieras de centenares de políticos, empresarios, miembros de la nobleza, figuras del espectáculos y deportistas, contenidas en más de 13 millones de documentos de sociedades creadas o que operan en paraísos fiscales, puestos a la luz por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación. La filtración se centra en Appleby, un estudio de abogados dedicado a organizar, esconder y administrar miles de empresas offshore, y uno de cuyos propósitos es evadir el pago de impuestos, además de otras operaciones poco transparentes. Los primeros impactos mundiales afectan la coherencia de los hombres públicos y privados, que exigen a los ciudadanos el pago de impuestos y el cumplimiento de la ley, en tanto que en su vida cotidiana realizan esfuerzos por eludir sus obligaciones. En el caso peruano, los datos disponibles hasta ahora aumentan la certeza de que un grupo importante de empresas y de ejecutivos respaldan formalmente el modelo económico y defienden la severidad de las leyes tributarias y, al mismo tiempo, realizan gigantescas operaciones en paraísos fiscales, varias de ellas exclusivamente para evadir el pago de impuestos. Según la información difundida por los portales Convoca y Ojo Público, varias de estas operaciones merecen ser investigadas por las autoridades, entre ellas la creación de un microseguro de vida y hospitalización por las empresas Belcorp y Paralife que habrían evadido las normas de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS). En otro caso, por la venta de la empresa Petro-Tech a la colombiana Ecopetrol y Knoc se habría dejado de pagar US$ 270 millones en impuestos en el Perú; o las operaciones del grupo Pluspetrol, que participa en el proyecto Camisea que, a pesar de reportar una cuantiosa deuda tributaria en el Perú, ha distribuido su patrimonio en varios paraísos fiscales del Caribe. Por lo menos en el primer caso, la SBS ha informado que Paralife no había reportado su participación en el momento de la creación del microseguro. Es muy extraño el silencio oficial y al más alto nivel en el Ejecutivo y el Congreso, en similar actitud a cuando se revelaron los Panama Papers. Este silencio se debe a una brecha indignante que da cuenta por un lado de la pérdida de la recaudación y, al mismo tiempo, la inacción del Estado para impedir la elusión y evasión tributarias. Según la SUNAT, el país pierde más de 55 mil millones de soles por ambas modalidades evasivas, a pesar de lo cual desde hace 3 años se encuentra suspendido el reglamento de la Norma XVI, del Decreto Legislativo 1121 que modificó el Código Tributario, que otorgaba facultades a la SUNAT para investigar a las personas y empresas que eludieran el pago de millonarios impuestos aprovechando los vacíos legales y actos artificiosos para transferir fondos a paraísos fiscales.