En el pasado también se usaban métodos anticonceptivos que, si bien se consideran naturales, eran extravagantes y no hay prueba científica de su eficacia.,En la actualidad, existen varios métodos anticonceptivos a los que recurren las parejas para evitar los famosos embarazos no deseados, pero, te has preguntado alguna vez ¿cómo se cuidaban las personas antes de que exista, el condón, la famosa píldora del día siguiente y los demás métodos que evitan un posible embarazo? Además de la abstinencia, en el pasado también se usaban métodos que, si bien pueden ser considerados como “anticonceptivos naturales” -puesto que las mujeres los usaban para evitar quedar embarazadas- eran muy extravagantes y no tenían un sustento o prueba científica que demostrara con exactitud su efectividad. Te mostramos algunos de los más llamativos: PUEDES VER Sangre dorada: el extraño tipo de sangre que puede salvar vidas, pero pone en peligro a sus portadores 1.Excremento de cocodrilo En el antiguo Egipto, las mujeres recurrían a un método tan curioso como oloroso para evitar el embarazo. Se trata de una sustancia pastosa hecha con excremento de cocodrilo y leche ácida, que se insertaban dentro de la vagina o en la vulva. El extraño ungüento era usado para crear una barrera ácida que impidiera el paso del esperma. Pero esta no es la única sustancia o crema extraña que usaban las mujeres en la antigüedad para protegerse. Otro método empleado por aquellas que se rehusaban a introducirse el material mencionado anteriormente era una mezcla de miel y bicarbonato de soda. 2.Evitar la luz de luna Este, quizá, es uno de los métodos menos extravagantes que usaban las mujeres en el pasado para evitar los embarazos. Los antiguos nativos de Groenlandia pensaban la luz de la luna era una de las causas por las que las mujeres quedaban embarazadas, de ahí que, si una mujer no quería quedar embarazada, tendría que evitar mirar la luna antes de irse a dormir. Asimismo, se debían frotar su vientre con saliva para impedir que la luz entrase dentro de ella. PUEDES VER Sarampión: ¿qué es, cuáles son las causas y cómo prevenir esta enfermedad viral? Cuando pensaban que ya estaban preparadas para engendrar un bebé, se desvestían bajo la luz de la luna para permitir la entrada de luz en su vientre. 3.Saltar hacia atrás y estornudar Por más extraño que parezca, en el siglo II, el ginecólogo griego Soranus recomendaba a las mujeres saltar hacia atrás siete veces y estornudar inmediatamente después de mantener relaciones sexuales para evitar el embarazo. Según Sonarus, la explicación de este ejercicio es que la fuerza del estornudo provoca la expulsión del semen del cuerpo de la mujer. Si bien es absurdo, era también uno de los métodos naturales usados en el pasado. 4.Condones de oveja y pescado Durante la Revolución inglesa (entre 1642 y 1688), los soldados del rey Carlos I fueron provistos de condones hechos con intestinos de pescado y oveja para protegerlos de enfermedades de transmisión sexual. Hacia finales del siglo XVIII, en Londres, dos tiendas se dedicaban a la exclusivamente a la venta de estos condones. Estos productos de intestino de oveja debían ser remojados en agua por un par de horas antes de usarse, para hacerlos más flexibles y fáciles de colocar. Se los ataba en la base del pene con un cordón para mantenerlos en el lugar y, después de usarlos, se los lavaba cuidadosamente, se los dejaba secar, y se los guardaba para la próxima ocasión. PUEDES VER Estos son los 7 métodos anticonceptivos más eficaces 5.Beber mercurio Este es uno de los métodos anticonceptivos del pasado más extremos. En el siglo VII, en China, se les recomendaba a las mujeres beber una tintura de metal tóxico para evitar el embarazo. Una de las recetas médicas indicaba freír mercurio con aceite, cuya mezcla debía ingerirse con el estómago vacío. Si bien podría haber servido para evitar el embarazo, esta mezcla venenosa provocaba esterilidad y, en muchos casos, una muerte agónica para las mujeres que la ingerían. 6.Testículos de comadreja En Europa, durante la Edad Media, los testículos de la comadreja eran apreciados como una especie de talismanes para evitar los embarazos. La Trotula, una guía médica femenina escrita en el siglo XII, recomienda cortar los testículos de estos animales vivos, envolverlos en piel de ganso, y usarlos como amuletos para evitar el embarazo. 7. Esponjas El Talmud hebreo describe un método anticonceptivo que consistía en poner en remojo una esponja de mar natural en vinagre e insertarla en la vagina para evitar el embarazo. No obstante, este método sólo se podía utilizar para tres propósitos: proteger a una chica que era demasiado joven para quedar embarazada, durante el embarazo para impedir la posibilidad de fertilizar otro óvulo, y para prevenir el embarazo mientras la madre estaba enferma.