¿El 30 de abril es feriado o día no laborable en Perú?

Lo peor no ha llegado

“Así las cosas, se torna inverosímil creer que este año 2021 se logrará la inmunidad de grupo. Y también está claro que solamente la vacuna no nos va a sacar de esta”.

Imagino que todos ya lo saben. O lo intuyen. La cosa viene mal. A nivel global, vamos por los 95 millones de contagios y 2 millones treinta y tantos mil muertos. El Perú se encuentra en el puesto 18 con más de un millón 60 mil infectados y está en el número 14 con cerca de 39 mil fallecidos por covid, según la Universidad Johns Hopkins.

Europa es el continente con más muertes oficiales (por encima de 615 mil). Le sigue América del Norte (más de 565 mil) y luego viene América del Sur (cerca de 385 mil).

El asunto se pone más feo cuando escudriñamos las cifras de fallecidos por habitante. Ahí el Perú ocupa el quinto lugar. A la cabeza está Bélgica (1,700 muertos por cada millón de habitantes). Luego figuran Italia, República Checa, Reino Unido y Perú. En el Perú mueren 1,165 personas por millón de habitantes, aproximadamente.

Como dice El País, “el virus tardó siete meses en cobrarse el primer millón de muertes, pero le ha bastado solamente tres para sumar el segundo millón”. Ello significa claramente que estamos bastante lejos de volver a la “normalidad”, a pesar de la existencia de las vacunas. Pues el ritmo de contagio, en lugar de frenarse, se ha acelerado.

Y es que el virus mutado, o la nueva variante, o la cepa británica, o como quieran llamarle, le ha dado una velocidad siniestra a la pandemia. Tanto que esta ya ha sido encontrada en cerca de cincuenta países, desde Singapur hasta Jamaica. Y se transmite hasta un 70% más rápido que las veintitantas variantes anteriores. Figúrense.

Así las cosas, se torna inverosímil creer que este año 2021 se logrará la inmunidad de grupo. Y también está claro que solamente la vacuna no nos va a sacar de esta.

En consecuencia, no podemos bajar la guardia, porque lo peor no ha pasado todavía. “No hay ninguna razón para pensar que la segunda ola será una más pequeña”, dijo hace pocos días en este papel el epidemiólogo Mateo Prochazka.

Y añadió: “En el Perú hay una falsa sensación de confianza. Se piensa que, por haber circulado el virus de manera amplia en la primera ola, hay inmunidad suficiente como para evitar que haya una nueva”.

En otras latitudes, por ejemplo, se está volviendo a los confinamientos, al cierre indefinido de colegios y a la ampliación de los toques de queda, debido al nuevo desborde de los hospitales y la saturación de los sistemas sanitarios.

Y para colmo, en muchos países donde hay antídoto eficaz, está fallando la logística para vacunar masivamente. En síntesis. Es de esperar la llegada de momentos más duros y más difíciles. Descuidarnos sería un acto suicida.

Pedro Salinas

El ojo de mordor

Periodista y escritor. Ha conducido y dirigido diversos programas de radio y tv. Es autor de una decena de libros, entre los que destaca Mitad monjes, mitad soldados (Planeta, 2015), en coautoría con Paola Ugaz. Columna semanal en La República, y una videocolumna diaria en el portal La Mula.