Muere bebé de 5 meses que necesitaba un trasplante de corazón: nunca llegó el órgano
La madre confirmó el deceso y destacó la urgencia de aplicar una ley de cardiopatía congénita y así tener un diagnóstico prenatal.
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Boris Mollar murió tras luchar durante 5 meses contra una miocarditis fulminante en el Hospital Italiano de Buenos Aires, Argentina. Necesitaba un trasplante de corazón, pero el órgano nunca llegó. Su madre, Karen Scansetti, agradeció por el apoyo recibido en ese tiempo y señaló que “Boris vino a enseñarnos muchísimo. A mostrarnos una carencia en la sociedad sobre la donación de órganos pediátrica. Nos vino a mostrar una realidad que viven muchas familias”, escribió en Instagram.
La desgarradora noticia del deceso fue confirmada por la madre al medio TN. Lamentablemente, la única alternativa que les quedaba no funcionó. “Seguimos porque nadie más tiene que pasar por esto, nadie más tiene que estar en este lugar y por los 200 niños que están actualmente en lista de espera. Tomemos conciencia porque es urgente”, pronunció Karen.
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Asimismo, destacó la urgencia de aplicar una ley de cardiopatía congénita y así tener un diagnóstico prenatal. Tal y como recalcó Karen, a Boris nunca se le trató antes de su nacimiento, incluso, todo parecía normal. “A nosotros nos hubiese servido para poder decidir dónde, cuándo y en qué condiciones debía nacer”, explicó.
No obstante, luego de unas horas de que el pequeño naciera, las enfermeras lo vieron morado por falta de oxígeno. Le diagnosticaron cardiopatía congénita, por lo que fue operado a los 15 días de nacido. Todo salió bien y fue dado de alta, pero al tiempo nuevamente el menor empeoró y tuvo que ser trasladado e internado en un hospital de la capital argentina.
Ya instalados, los médicos le dijeron a Karen que el pequeño sufría de la miocarditis fulminante y necesitaba con urgencia un trasplante de corazón, pero Boris no soportó la espera. “Finalmente, te das cuenta de que todo de lo que alguna vez te quejaste, es banal, no tiene importancia. (…) Aprendes a valorar muchísimo la vida, un gesto, una mirada, una palabra sanadora, que antes no tenía el mismo peso si la escuchabas, pero ahora te hace un click”, escribió la madre antes del deceso.
Finalmente, Karen expresó que su bebé le brindó un nuevo aprendizaje pese al sufrimiento. “Comprendes que hay un antes y un después que te marca, te reconstruye y te potencia. Nace tu mejor versión. Y yo entendí, que mi dolor es un puente hacia algo mejor”, finalizó su publicación.
