En EEUU. Se han quedado en Nueva York. Juan José Lázaro Jr. y Waldo Mariscal se han refugiado en un departamento. El menor vendría al Perú con su madre. Si bien los espías detenidos en Estados Unidos ya están libres en Rusia, el destino de sus hijos, quienes aún permanecen en ese país, es incierto, entre ellos los dos hijos de la periodista peruana Vicky Peláez que han perdido su casa en Nueva York, y uno de ellos incluso hasta el apellido. Waldo Mariscal, de 38, y Juan Lázaro Jr., de 17, hijos de Vicky Peláez, se han refugiado en un departamento luego de que su vivienda quedó confiscada por el gobierno americano en virtud del acuerdo suscrito con sus padres para ser puestos en libertad. El menor de ellos, Juan Lázaro Jr., hijo del también espía Mijail Anatonoljevich Vasenkov, conocido como Juan Lázaro, tendría la intención de quedarse a vivir en Estados Unidos junto a su hermano mayor, aunque no se ha descartado que opte por hacerlo con su madre en el Perú, país al que volvería tras ser expulsada de EEUU. La situación legal de Juan Lázaro es compleja, pues ha quedado demostrado que Lázaro no es su apellido verdadero, lo que obliga a rectificar varios documentos, antes de salir de Estados Unidos. Los mismos problemas de identidad enfrentarán los hijos de los espías que se hacían pasar como Donald Heathfield y Tracey Foley, Michael Zottoli y Patricia Mills y Richard y Cynthia Murphy, quienes han inscrito a sus hijos con sus nombres falsos. Los dos hijos de quienes se hacían llamar Donald Heathfield y Tracey Foley, de 20 y 16 años, son los únicos que viajaron a Rusia para reunirse con sus padres. Los niños de Michael Zottoli y Patricia Mills, de uno y 3 años, se encuentran en EEUU en los preparativos para reunirse con sus padres en Moscú, mientras que se desconoce qué pasará con los hijos de Richard y Cynthia Murphy, de 11 y 7 años, quienes se mantienen en el país en el cual nacieron. Datos Los hijos. En total fueron 8 los hijos de los espías que se vieron perjudicados por las actividades secretas que realizaban sus padres. Seis de ellos son menores de edad. Cambio de vida. Si bien el acuerdo para la expulsión de los espías respeta el derecho de los hijos nacidos en Estados Unidos a permanecer en ese país, varios de ellos cambiarán por completo sus vidas para irse a vivir a Rusia con sus padres.