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Tesla vuelve a la presencialidad obligatoria con acusaciones de racismo y acoso

Luego de que Musk obligara a volver a sus trabajadores a pesar de no tener espacio suficiente para todos en las oficinas, ha surgido esta denuncia con 10 casos.

Según The Verge, algunos empleados optaron por aparcar sus coches en la cercana estación del sistema de transporte metropolitano BART. Foto: AFP
Según The Verge, algunos empleados optaron por aparcar sus coches en la cercana estación del sistema de transporte metropolitano BART. Foto: AFP

Tesla no estaría pasando por buenos momentos laborales. Luego de que sus empleados informaran que regresaron a la presencialidad de manera obligatoria y sin espacio suficiente en las oficinas, un informe de Reuters revela que la empresa tiene al menos 10 demandas por discriminación o acoso generalizado en el ámbito legal.

Esta denuncia implicaría a 15 empleados negros, actuales y anteriores, de la compañía que presentaron una demanda contra el fabricante de autos eléctricos alegando abuso racial en el lugar de trabajo, específicamente en la fábrica en la ciudad de Fremont, California.

Términos como “nigger” (con una fuerte connotación racial peyorativa en EE. UU.), “esclavitud” o “plantación”, además de expresiones con un fuerte contenido sexual, formaban parte de la rutina de un ambiente con “descaradas, abiertas y discriminación racial no mitigada”, manifiesta el documento al que tuvo acceso la agencia de noticias Reuters.

El racismo sería perpetrado por gerentes y empleados de recursos humanos de manera regular, incluso dirigiendo a algunos de los denunciantes a actividades “físicamente exigentes” en la fábrica o pasando por alto para la promoción, según la demanda.

Tesla enfrenta, incluso, un proceso judicial presentado por un accionista que acusa directamente al CEO Elon Musk y a la junta directiva de negligencia con denuncias internas de mala conducta (en mayor o menor grado) en el lugar de trabajo.

Presencialidad obligada y despidos

Elon Musk también estaría siendo señalado porque ordenó a sus trabajadores volver a las oficinas o, si no, que se atuviesen a las consecuencias; sin embargo, la empresa no estaba lista para recibir a los empleados en su totalidad, ya que, según informa The Information, no todos encontraron suficientes escritorios ni plazas de aparcamiento en el local.

El personal dijo que debido al aumento de contratación y que se encuentran en remodelación, algunas partes de las oficinas han hecho que el espacio sea abarrotado, por lo que algunos directivos tuvieron que mantenerse en el trabajo virtual de todos modos.

La noticia llega en medio de los reportes de que la empresa ha cerrado una oficina en la ciudad californiana de San Mateo, recortando unos 200 puestos de trabajo.

Según The Information, Tesla duplicó el número de trabajadores desde el 2019 y que ahora cuenta con 99.210 personas en todo el mundo, de los cuales la mayoría labora por horas.

Aunque a principios de este mes, Musk comentó que este exceso de contratación da “sensación supermala” sobre la economía, por lo que da razones para una congelación de la contratación y los despidos en toda la compañía que incluyen tanto a los empleados asalariados como a los que trabajan por hora.

Con esto, se vuelve a abrir otro episodio sobre el impetuoso estilo de liderazgo de Musk en Tesla, pues varios medios de comunicación informaron que la compañía se ha visto, incluso, obligada a retirar ofertas de trabajo a personas que ya habían sido aceptadas.