¿El 30 de abril es feriado o día no laborable en Perú?
Mundo

Argentina: estuvo aislada por COVID-19 y no pudo despedir a su madre fallecida por el virus

Una amiga suya llegó desde Europa y las contagió, su madre pasó 21 días internada hasta que falleció por coronavirus. Hoy, recuperada, continúa temiendo más contagios.

Una amiga suya llegó de Europa sin saber que traía el virus. Ambas se contagiaron, pero su madre falleció. (Foto: Facebook)
Una amiga suya llegó de Europa sin saber que traía el virus. Ambas se contagiaron, pero su madre falleció. (Foto: Facebook)

Celeste Arias, una mujer de 33 años, se contagió de COVID-19 el mismo día que su madre, en Argentina. Lamentablemente su mamá falleció mientras ella se encontraba aislada. No pudieron despedirse y Celeste recuerda la última noche que estuvieron juntas en una cena en su casa. Invitó a una amiga suya que vino de Europa y las contagió.

La reunión tuvo lugar el pasado 28 de febrero, según relata Celeste para el portal Infobae. Su madre falleció 21 días después, internada en la Clínica Güemes de Resistencia, en Chaco. Tenía 63 años, era abogada y trabajaba en el Poder Judicial.

“Ese viernes yo me junté con mi mamá para cenar. Mi amiga que llegó de Rusia (había hecho una parada en España) me invitó a su casa, pero le dije que viniera a casa de mi mamá. Mi mamá estaba bien, no tenía ningún síntoma”, relata la mujer ya recuperada del virus.

Al día siguiente de esta cena, Celeste fue la primera en presentar síntomas. “Me sentí mal, incluso antes que mi amiga. Se me había inflamado un ganglio, pero no le di importancia”, cuenta.

Celeste recuerda a su madre por siempre buscar la unión familiar. (Foto: Facebook)

Celeste recuerda a su madre por siempre buscar la unión familiar. (Foto: Facebook)

Comenzó a aislarse por su cuenta en su casa, desde el 10 de marzo, y ese día se enteró que su amiga era sospechosa de haber contraído la COVID-19. De inmediato mandó a su madre a la clínica donde fue internada.

“Ni la pude ver, me sentí muy mal días antes que ella, tuve fiebre alta, dolor de ojos, pero después me recuperé”, recuerda Celeste.

Sobre su amiga que llegó del extranjero, añade que no la culpa por el contagio. “Cuando llegó no estaba decretada la zona de riesgo. Nosotros tuvimos el contacto con ella el 28 de febrero. Mi amiga se comunicó conmigo muchas veces, está muy mal, deprimida. No tuvo mala fe”, señala.

Celeste contó que los primeros días que su madre permaneció internada estuvo en una habitación común. “Estaba con suero y se ahogaba”. Ella pidió que sea trasladada a terapia intensiva, pero a pesar del cambio, su mamá falleció.

“Es que mi mamá era tan especial, ¿cómo no nos dimos cuenta que se iba a ir pronto?”. Ahora recuperada, Celeste se informará sobre el proyecto para donar plasma para una posible vacuna, pero no deja de lado su preocupación por el virus. “Te queda un trauma, aunque te den el alta, piensas que puedes seguir contagiando”, culmina.

Los artículos bajo la firma Mundo LR son elaborados por nuestro equipo de periodistas especializados. Un grupo de editores se encarga de revisar minuciosamente estas publicaciones, por lo que se garantiza que cada uno de sus contenidos cumpla con nuestra línea editorial y resulte relevante para nuestros lectores.