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“La vi y solo pensé en matarla”: cadena perpetua para adolescente que violó y asesinó a niña

Antes de recibir cadena perpetua por abuso sexual y asesinato de una pequeña de seis años en Escocia, Aaron Campbell (16) dio un testimonio escalofriante. 

“La vi y solo pensé en matarla”: cadena perpetua para adolescente que violó y asesinó a niña
“La vi y solo pensé en matarla”: cadena perpetua para adolescente que violó y asesinó a niña

Aaron Campbell, un adolescente escocés de 16 años, fue condenado por los delitos de violación sexual y asesinato contra una pequeña de seis años. El feminicidio fue tan brutal, que un oficial que trabajó en el caso rompió a llorar mientras daba pruebas, y un patólogo experimentado dijo que nunca había encontrado lesiones tan "catastróficas" en toda su carrera.

Sin embargo, cuando el escolar de la pintoresca isla de Bute (Escocia) se levantó para recibir su condena en la Corte Suprema de Glasgow, no se inmutó, ni bajó la vista. El abuso sexual y asesinato de Alesha MacPhail ocurrió el pasado 2 de julio de 2018, pero un año después apenas se limitó a decir: “en otro momento de mi vida, el asesinato no habría sido la conclusión. Si fuera un año más joven, no creo que lo hubiera hecho. Todo lo que pensé fue en matarla una vez que la vi”.

Campbell recibió un mínimo de 27 años de prisión después de admitir sus delitos. El juez Lord Matthews impuso una sentencia de por vida por el asesinato "brutal" y lo describió como un "individuo frío, insensible, calculador, implacable y peligroso".

Juzgado


El juez dijo que el adolescente había mostrado total arrogancia durante el juicio y no se había declarado culpable a pesar de la abrumadora evidencia en su contra. Alesha, que se alojaba con su padre y su abuela en su casa en Rothesay, Isla de Bute, fue reportada como desaparecida alrededor de las 6,25 de la mañana de la mañana del 2 de julio.

Tres horas después, su cuerpo fue entonces descubierto por la policía en los terrenos de un hotel abandonado a media milla de distancia. Campbell había bebido una botella y media de vino, y había fumado marihuana. Tras llevarla a los bosques locales y cometer el asesinato, fue a una playa cercana, se deshizo de la ropa ensangrentada y volvió a la escena del crimen para obtener su teléfono móvil.