Economía

Es clave el ingreso de Petroperú a los lotes X y VII/VI de Talara

El petróleo es vendido a precio internacional a la propia refinería de Talara. Catedrático Alexei Huerta precisa que ingreso de la estatal a más lotes es la clave para garantizar la seguridad energética del país.

Proyecto insiste en la reprivatización de los lotes petroleros con una participación mínima de la petrolera estatal para el abono por concepto de regalías (de 25% a 5%). Foto: Difusión
Proyecto insiste en la reprivatización de los lotes petroleros con una participación mínima de la petrolera estatal para el abono por concepto de regalías (de 25% a 5%). Foto: Difusión

Cuando Petroperú recibió la encargatura del Lote I para su explotación, la idea original era que el plazo de concesión culmine casi cuando también lo hacían los lotes VI y VII, circundantes, para así convertirlos en un solo gran lote que administrara la petrolera estatal.

Así lo refiere Alexei Huerta, catedrático de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), quien advierte que este paso resulta trascendental para garantizar la operación y asegurar la seguridad energética del país, en momentos en que el petróleo supera los US$ 100 en promedio por barril.

De acuerdo al especialista, con los precios actuales es perfectamente viable que Petroperú opere todo ese campo, en vista de la buena ejecución que tuvo sobre el Lote I, una especie de “laboratorio” para sus operaciones upstream en la cuenca del norte, y en respuesta a los cuestionamientos por un presunto desbalance fiscal que se lo impedirían.

“¿Cuál es el precio que gatilla las inversiones de desarrollo en perforación? En Talara, es viable perforar hasta con precios de US$ 50. Con precios de US$ 40, la operación se mantiene sin mayores problemas con la actividad diaria, y con US$ 60 es posible hacer inversiones de desarrollo”, asegura Huerta.

“Si uno se pone como operador, inmediatamente empieza a ver ganancias. No habría necesidad de hacer grandes inversiones para recibir los lotes”, señala el docente.

Además, explica que, como existe la necesidad de obtener los permisos ambientales y sociales -proceso que puede tomar, aproximadamente, año y medio a dos-, pero sin inversiones grandes de desarrollo, la petrolera estatal podría podría invertir en trabajos de workover (reactivación de pozos, apertura de nuevas zonas o el aislamiento de otras) y dispensar de ingresar con un socio para estos primeros dos años.

En este último punto, explica, podría resultar una fórmula también factible para la operación del Lote X, uno de los más grandes en la zona y con una producción de más de 10.000 barriles por día.

“Hay espacio para que la compañía mantenga la producción y evalúe convenientemente con quién se va a asociar. En todos los escenarios se vislumbran precios de más de US$ 50 a futuro, algunos expertos incluso hablan de US$ 200. En ese tiempo, en tres o cuatro años, Petroperú puede establecerse como operador y tener un socio para estas inversiones de riesgo, que serían las de perforación de pozos y recuperación secundaria”, manifiesta el experto.

“Talara no es tan complicado, porque el hidrocarburo está cerca de la refinería. El manejo operativo de los campos también es viable, el Lote I es un laboratorio de los otros lotes que, básicamente, manejan la misma filosofía de explotación”, concluye.

Petroperú y las inversiones en tecnología

De otro lado, Alexei Huerta señala que traer a Petroperú a los lotes VI y VII podría representar un importante avance tecnológico para toda la cuenca de Talara. Ello, a razón de que el operador de ambos, Sapet, no ha buscado “una mejora continua en el desarrollo de los reservorios”.

“El lote X quizá ha tenido algo más de inversión y actividad, yo diría que se ha manejado de manera distinta, especialmente cuando estuvo Petrobras (hoy está la china CNPC, también propietaria de Sapet). Pero Petroperú sí podría lograrlo, y eso depende mucho del equipo que conforme para el manejo operativo con estándares más altos”, precisa el catedrático.

“Valgan verdades, Petroperú es más exigente en temas de contratos, seguros y responsabilidad social, porque tiene estándares más altos en cuanto a sus actividades que las otras empresas ahí asentadas, así como gestión operativa con más control”, agrega.

En este sentido, Huerta explica que, debido a los diferendos políticos, estos temas técnicos de crucial relevancia no son tomados en cuenta, pues existe el temor de “dejar las cosas abandonadas” (en referencia a que Petroperú no tendría recursos para ingresar a más lotes en Talara).

“En Talara, particularmente, deberíamos mirar hacia qué hacer mejor para que estos contratos nuevos traigan tecnología, trabajo y mejor calidad de la vida para el beneficio de las empresas y comunidades de la zona de influencia”, culmina.