La presidenta del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, busca agregar cambios en la institución con visiones menos ortodoxas. ,En su última visita a Buenos Aires (Argentina) para la reunión del G-20, la presidenta del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, reveló en declaraciones que se buscará cambiar la imagen de este organismo internacional. "Tenemos un FMI muy diferente", confesó Lagarde en Argentina, un país donde existe rechazo a la entidad que preside. PUEDES VER Mercados ya avizoraban los cambios políticos y reaccionaron estables Según narró el diario español El País, la visita de un presidente del FMI a Argentina no se realiza desde el 2004, cuando recibieron a Rodrigo Rato entre protestas y disturbios que dejaron 10 heridos y 100 detenidos. Esta vez, según El País, Lagarde tuvo tiempo de realizar turismo en las cataratas de Iguazú previo a las reuniones del foro internacional. Antes, en su visita a Paraguay, visitó el barrio San Francisco, donde radican 1.000 familias que vivían en favelas y que no sintieron el crecimiento del país. También acudió a Ciudad Mujer, lugar que acoge a 200 mujeres con problemas de violencia. Ahí, Lagarde prohibió el acceso a los hombres de su comitiva, funcionarios internacionales de alto nivel. “Lagarde tiene una visión menos ortodoxa del FMI; trae a la agenda la equidad, la lucha contra la pobreza y la igualdad de género, un asunto fundamental en países en desarrollo”, resaltó Lea Giménez, ministra de Hacienda paraguaya. Christine Lagarde se encuentra a la cabeza del FMI desde julio del 2011 y antes se desempeñó como ministra de Economía de Francia.