¿Cómo limpiar tu parrilla para dejarla como nueva?: 5 trucos caseros para lograrlo

¿Sabes cómo limpiar tu parrilla o darle mantenimiento al asador? ¡Manos a la obra con estos trucos caseros! El aseo diario es fundamental para que tus carnes y vegetales a la brasa conserven la textura y el buen sabor mientras se cocinan en la barbacoa. A continuación, te explicamos cómo preservar por mucho tiempo tu parrilla, tal como te enseñamos a evitar que tu cocina se llene de grasa.

Una parrilla muy bien cuidada siempre será una aliada al momento de reunirse los fines de semana, en la playa o para los campamentos de vacaciones. Incluso, si se mantiene brillosa y sin óxido, puede sorprender y consentir a tus invitados.

¿Con qué frecuencia debo limpiar la parrilla?

De preferencia, limpia tu parrilla luego de haberla usado, para evitar que la grasa y la mugre se impregnen. El aseo constante también te permitirá sacar la suciedad de forma más fácil y rápida en cada mantenimiento que le des cada tres o cuatro meses, con el fin de evitar que se oxide.

¿Qué se necesita para limpiar la parrilla?

Los utensilios básicos para dar una limpieza profunda a tu parrilla son:

• Cepillo de cerdas
• Balde
• Agua tibia
• Vinagre
• Bicarbonato
• Papel de diario
• Papel de cocina.

Trucos caseros para limpiar la parrilla

Te compartimos estos consejos para que puedas asear y preservar el buen mantenimiento de tu parrillla o barbacoa, mismos que te ayudarán a que se ensucie menos y te duren mucho más:

Aplica cebolla o limón

Debes usar cebolla o limón inmediatamente después de limpiar y desinfectar tu parrilla, ya que ambos permiten desengrasar tu asador y funcionan como elementos antibacteriales.

Mientras está caliente y para que no se penetre el olor fuerte de la cebolla, frota con mucho cuidado cada una de las rejillas. Luego, usa un trapo para limpiar los residuos.

Líquidos especiales para limpiar hornos y parrillas

Puedes usar un producto especial que limpia hornos para asear tu parrilla. Para ello, rocía en las zonas donde abunda la grasa y déjalo reposar de un día para otro.

Posteriormente, usa un cepillo con cerdas de metal y un trapo para quitar los residuos. El limpiador facilitará que quites la mugre acumulada.

Bicarbonato de sodio

Este compuesto sólido cristalino muy popular para todo tipo de limpieza en el hogar es muy amigable para eliminar la grasa y suciedad de las parrillas.

Mezcla el bicarbonato de sodio con un poco de limón y usa un trapo de microfibra o una esponja para frotar las rejillas de la barbacoa.

También te puedes ayudar con un cepillo de cerdas metálicas para quitar todos los residuos sin complicación.

Un poco de arena para restregar

Si estás disfrutando con tu familia en la playa, aprovecha la arena de tu alrededor. Tras haber preparado tus carnes o vegetales jugosos, espolvorea un poco de arena sobre las rejas de tu asador.

Una vez que se pegue con la grasa, te ayudará a que se desprenda más rápido. Procura evitar que se bloquee algún hueco o conexión si tu parrilla es a gas.

Quita el óxido con vinagre

Si tu parrilla está oxidada, considera usar vinagre, producto natural que resulta eficaz y de fácil acceso para mantenerla con vida. De no tenerla en tu cocina, puedes comprarla en la bodega más cercana o algún supermercado.

Su propiedad ácida hará que, tras sumergir tu asadora toda la noche, sea más factible sacar el óxido. Finalmente, usa un trapito con aceite neutro y refriega cada varilla con cuidado.